El gobierno de Italia no desmintió ni confirmó una versión periodística según la cual habría declarado personas no gratas al jefe de la CIA y dos agentes de la agencia norteamericana en este país, tras haber descubierto una operación secreta de la que no había sido informado.
El periódico de Estados Unidos "US News and World Reports", afirmó este domingo que el conflicto se originó por la detención en Italia, en una acción contra un grupo sospechoso de actividades terroristas viculadas con el Oriente Medio, de un agente de la CIA infiltrado en esa organización.
Hasta ese momento las autoridades italianas no tenían información alguna de la existencia de la operación de infiltración del funcioanrio norteamericano.
Las reglas no escritas que rigen la actividad de los servicios secretos entre países aliados estipulan que los agentes deben informar de eventuales operaciones que realicen en territorio del otro país.
La información del periódico estadounidense revela que el mes pasado, el jefe de la CIA en Roma y al menos otros dos agentes secretos norteamericanos debieron ser retirados por su gobierno y escaparon con "la cola entre las piernas" para evitar ser expulsados por el gobierno italiano.
La CIA habría argumentado que el agente no había informado de la operación ni siquiera a su propia organización.
La actividad del supuesto grupo terrorista fue denunciada a los agentes italianos por el propio jefe de la CIA en esta capital.
Según el diario norteamericano, el gobierno italiano habría protestado por la violación de los acuerdos y declarado al jefe de la CIA en Roma, al infiltrado y a otro agente, "personas no gratas".
El influyente diario "La Repubblica" tituló este lunes la información referida al caso aludiendo a la "metida de pata" de la CIA.
A pesar de la pausa estiva de la actividad de gobierno, algunos políticos criticaron el comportamiento de la CIA, que "actúa aún hoy en Italia como en una colonia", como afirmó el ex presidente de la Comisión Defensa de la Camara de Diputados Falco Accame.
Accame, un experto en cuestiones militares, que representó en legislaturas pasadas al Partido Socialista, señaló que "es grave que en Italia se deba saber del alejamiento del jefe de la CIA en Roma por la prensa estodounidense".
El ex diputado consideró increíble que las comisiones parlamentarias interesadas en estas materias, como las del Interior, Exterior, Defensa y Justicia, no hayan sido informadas de esta historia.
El ex almirante y ex jefe del Servicio de Inteligencia Militar (Sismi) en los años 80, Fulvio Martini, sostuvo que "no podemos hablar de una 'gaffe' de la CIA basándonos en cuanto ha escrito un periódico norteamericano, además en plena campaña electoral".
Martini, un gran conocedor de los mecanismos internos de los servicios secretos, no sólo italianos, señaló que "sería mejor que el hecho fuera confirmado también por fuentes oficiales, en todo caso, la infiltración es una técnica bastante usual y los inconvenientes pueden suceder siempre.
La embajada de Estados Unidos en Roma, como es habitual, se abstuvo de formular comentarios sobre cuestiones de servicios secretos.
De todos modos, fuentes de la representación diplomatica estounidense señalaron que la colaboración entre las autoridades norteamericanas e italianas en esta esfera, como en todas las relaciones bilaterales, es y se mantiene excelente.
Un informe de la CIA de 1976 afirmaba que en Roma actuaban unos 15.000 espías de todas partes del mundo. (FIN/IPS/jp/jc/ip/96