El ministro de Defensa de Honduras, coronel Luis Núnez Bennett, declaró que su país buscará el diálogo para evitar roces en la frontera con El Salvador y Nicaragua.
La semana pasada, un grupo de propietarios de embarcaciones pesqueras de la costa atlántica se retiró de la frontera marítima con Nicaragua por la presencia de cuatro lanchas militares que les impidieron sus labores entre el paralelo 15 y 17.
Según el gobierno de Honduras, la frontera marítima con Nicaragua es el paralelo 17, pero ese país comenzó a ejercer soberanía desde el paralelo 15.
El diario hondureño "La Prensa" indicó que el 30 de julio civiles salvadoreños quemaron cinco viviendas, mataron un caballo e hirieron a dos miembros de la cooperativa "15 de septiembre", afiliada a la Alianza de Organizaciones Campesinas.
Este domingo la Cancillería de El Salvador negó ese extremo, pero indicó que se están realizando investigaciones sobre los hechos denunciados.
La zona de Dolores es uno de las sesis que estaban en disputa entre Honduras y El Salvador, antes del fallo de la Corte Internacional de Justicia de septiembre de 1992.
Esa región pasó a depender de El Salvador, mientras las otras cinco, habitadas por salvadoreños, dependen ahora de Honduras.
Honduras y El Salvador fueron a una guerra en 1969, pero en 1980 firmaron un Tratado General de Paz y acudieron conjuntamente ante la Corte Internacional para definir la frontera terrestre y marítima.
El fallo favoreció a Honduras al otorgarle el 70 por ciento de los 424 kilómetros en disputa en la frontera terrestre.
Los esfuerzos de una comisión binacional para dirimir los asuntos pendientes no han logrado aun frutos en temas como el acceso a la doble nacionalidad de los habitantes del área o propiedad de la tierra. (FIN/IPS/tm/dg/ip/96)