Pescadores y ecologistas del sur de Honduras anunciaron hoy una marcha sobre la capital en protesta por la destrucción causada por la cría del camarón en el área del golfo de Fonseca, que alberga importantes recursos naturales.
El Comité para la Defensa de la Flora y Fauna del Golfo de Fonseca (Codefagol) aseguró que la expansión de la industria camaronera acaba con el ecosistema marino del golfo y destruye el medio de vida de los pescadores.
El Estado presencia los hechos con "indiferencia" y, "en vez de proteger el ambiente, fomenta su destrucción autorizando más industrias camaroneras" en la región, afirmó Saúl Montufar, dirigente del Codefagol.
"Estamos cansados de denunciar y protestar y, como no vemos respuestas concretas, los pescadores de la zona vendremos a tomarnos la capital en una peregrinación que busca salvar el golfo y la vida de nuestros pescadores", anunció Montufar.
"No queremos que nuestros manglares y demás recursos marinos desaparezcan en nombre del desarrollo", agregó.
La región del golfo de Fonseca es compartida por Honduras, Nicaragua y El Salvador, y constituye uno de los recursos naturales más importantes de América Central.
Sus humedales cubren una superficie aproximada de 1.000 kilómetros cuadrados, con estuarios compuestos por bosques de manglar, arroyos, planicies inundables y lagunas de invierno.
El desarrollo de la industria del camarón de cultivo ha afectado el habitat natural del golfo y de los pescadores artesanales.
La superficie ocupada por las fincas camaroneras en el golfo de Fonseca aumentó de 1.000 a 11.500 hectáreas en 10 años, según un estudio de la Universidad para la Paz, dependiente de la Organización de Naciones Unidas y radicada en Costa Rica.
La mayoría de los criaderos se encuentran en territorio hondureño. El camarón es el tercer producto de exportación de Honduras, que obtiene por ese concepto 100 millones de dólares al año y empleo permanente para 10.000 personas.
La Asociación de Camaroneros ha afirmado que su crecimiento ha sido compatible con la preservación del ambiente. Pero la organización internacional Greenpeace advirtió que la región del golfo de Fonseca sufrirá un colapso ambiental si no se toman medidas correctivas. (FIN/IPS/tm/ff/en/96)