Países del Caribe se unieron en una propuesta común para atraer el turismo, tras un esfuerzo de Cuba, Jamaica y República Dominicana por la incorporación de Haití a la política conjunta de mercadeo.
La campaña de la Organización Caribeña de Turismo (CTO según sus siglas en inglés) exalta "el Caribe" como destino para las vacaciones, en lugar de los países individuales.
La organización espera que países como Haití, cuya imagen ha sido empañada por años de inestabilidad política, puedan asegurar 10 por ciento del flujo de visitantes resultante de la promoción.
Patrick Delatour, coordinador nacional del proyecto en Haití, dijo que una comisión presidencial sobre crecimiento económico estudia la inclusión de incentivos al desarrollo del turismo en un nuevo código de inversión o "sumarnos a nuestros vecinos, hasta ahora nuestros principales competidores".
El Mediterráneo absorbe gran parte del flujo de dólares del turismo que podrían llegar a la región, indicaron autoridades de la CTO.
Autoridades haitianas confirman que las señales de agitación política causan que de inmediato los turistas repiensen el destino de sus vacaciones, y la tendencia es a salir de la cuenca del Caribe.
La reciente visita de la CTO a Haití finalizó con un acuerdo para capacitar a personal del país caribeño en la promoción de varios sectores relacionados al comercio turístico, y estudien la reorganización de servicios turísticos en varios puertos de entrada al Caribe.
La CTO también respaldará el desarrollo de un instituto de estudios sobre turismo en Haití y campañas para mejorar la imagen del país en el exterior.
El gobierno haitiano, junto al Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), acaba de completar un plan para la industria turística, y los estudios revelan que el país podría tener entre 20.000 y 35.000 habitaciones de hotel, aunque en la actualidad sólo cuenta con una fracción de esa cifra, y muchos no alcanzan un nivel internacional.
Entre 20.000 y 30.000 habitaciones de hotel están disponibles en República Dominicana. Jamaica y Cuba tienen números similares, y Haití prevé aumentar su cuota a 7.000 en el 2004.
La ministra de Turismo, Maryse Penette, dijo que el país debe ser visto como un lugar seguro, o Haití no podrá reincorporarse al mapa turístico mundial.
Aunque la industria turística comparte esa opinión, la Misión de Apoyo de las Naciones Unidas en Haití considera que los medios de comunicación han exagerado el problema.
"Existe la percepción de que las cosas son más peligrosas", dijo Henrique Terhorst, representante personal de la secretaría general de la ONU.
Las malas condiciones de la infraestructura de caminos y aeropuertos han sido un disuasivo en el desarrollo del turismo en el norte del país.
Mientras, Haití "podría absorber un gran porcentaje de los 1,4 millones de turistas que visitan República Dominicana en el eje de Puerto Plata-Samana, si pudiera construir una ruta de 52 kilómetros conectando Cap-Haitien con la frontera", dijo un comerciante de la zona.
Cientos de turistas alemanes logran cruzar la frontera cada semana para visitar los monumentos históricos de Sans-Souci y la Ciudadela Christophe, catalogados como patrimonio de la humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
Haití recibía más de 40.000 turistas al año durante la decada de 1970, pero ahora, excluyendo los cruceros, sólo llegan 3.000. (FIN/IPS/tra-en/imc/fn/lp/if/96