La inflación retrocedió en junio a 7,1 por ciento en Venezuela, frente a 12,6 en mayo, pero se mantuvo como la más alta de América Latina al totalizar 62,3 por ciento en el primer semestre del año, informó el Banco Central.
"Comienza a verse la reducción después del salto causado por los ajustes", dijo el ministro de Planificación, Teodoro Petkoff.
Pero Petkoff admitió que se aguarda todavía en la gráfica del movimiento de precios la "jorobita" que dibujará, este mes o en agosto, el incremento del impuesto a las ventas.
El crecimiento general de precios de 7,1 por ciento en junio estuvo deterninado por alzas mayores en alimentos (7,9) vestido y calzado (12,6), y menores en gastos del hogar (5,0) y diversos (6,9).
El acumulado para lo que va de año es de 62,3 por ciento, y la inflación anualizada junio 1995-junio 1996 llega a 108,1 por ciento.
El Banco Central atribuyó el alza de mayo a nuevos incrementos en los alimentos de mayor consumo: huevos, leche, aceite, margarina, arroz, harina de maíz, azúcar y café.
Alimentos esenciales han incrementado su precio casi todo el año, pero en mayo se registraron ofertas a precio rebajado de pollo, queso, hortalizas y algunos pescados, debido a "una disminución en la venta de estos productos", señaló el instituto emisor.
"En síntesis, la desaceleración (en junio) del índice de precios al consumidor obedece a la estabilidad mostrada por el mercado cambiario y a una impotante reducción en la demanda de bienes y servicios", según el Banco Central.
Al cabo de varios años de recesión en la economía no petrolera, alta inflación, creciente desempleo e incremento de la pobreza, el presidente Rafael Caldera lanzó en abril un programa de ajuste cuyo primer objetivo es abatir la inflación.
Para ello, se abandonaron los controles de precios, del mercado cambiario y de los tipos de interés, produciéndose el "salto" inflacionario tras el cual, según los planificadores del gobierno, la inflación decrecerá hasta dos por ciento en diciembre y la economía se reanimará en 1997.
En las próximas semanas, el termómetro de la inflación deberá registrar la liberación de las tarifas del transporte aéreo, un alza de 35 por ciento del servicio de teléfonos y el aumento del impuesto a las ventas, de 12,5 a 16,5 por ciento. (FIN/IPS/hm/ff/if/96