La visita a Alemania del presidente de Perú, Alberto Fujimori, prevista para el 10 de octubre, marcará un "nuevo auge" en las relaciones bilaterales, según el ministro alemán de Relaciones Exteriores, Klaus Kinkel.
El ministro hizo estas declaraciones a IPS después de entrevistarse este jueves en Bonn con el primer ministro de Perú, Alberto Pandolfi, y el titular de la cartera de Economía y Finanzas, Jorge Camet.
Kinkel destacó que en los últimos cinco años Perú ha "progresado de forma considerable y digna de mención en la consolidación de la democracia y el saneamiento de la economía".
En 1991, este país sudamericano se encontraba al borde de la quiebra y desde entonces ha realizado adelantos extraordinarios».
Luego explicó que el tema central de la conversación con los políticos peruanos fue el refinanciamiento de su deuda externa estatal con el Club de París y que la posición peruana cuenta en este caso con el apoyo alemán.
Pero el ministro alemán manifestó dudas sobre si los demás acreedores estarán de acuerdo con la propuesta peruana, que contempla una novedosa restructuración de su deuda interestatal, pues esta se extendería hasta el 2015.
Además, el Ministerio de Relaciones Exteriores alemán tiene que someter aún esta propuesta a los ministerios federales de Economía y Finanzas.
Las dos visitas consecutivas a Alemania de Camet, en el curso de una semana, así como la actual gira relámpago por Europa de la delegación ministerial del país sudamericano pone en evcidencia la urgencia que tiene el gobierno de Fujimori de obtener cuanto antes el apoyo de sus principales acreedores.
Al respecto, Kinkel respondió que estas negociaciones son decisivas para Perú, porque si no consigue ahora un arreglo los obligaciones de la su deuda externa, incluidos servicio y amortizaciones, adquirirían dimensiones gigantescas en los próximos años.
Por esta razón, "hay que respaldar a Perú, y yo haré lo que esté a mi alcance, para que se libre de esa presión y prosiga por el camino emprendido", afirmó Kinkel.
Con respecto a la situación de los derechos humanos en el país latinoamericano, dijo que pese a los progresos alcanzados en este campo, aún quedan puntos pendientes" y que sobre esto conversó en Bonn con los ministros peruanos, como ya lo había hecho hace dos meses, durante una visita a Perú.
A su regreso del viaje por varios países de América Latina, Kinkel sugirió al ministro alemán de Justicia que visitase pronto Perú y Chile, pues Alemania podría ayudar a la consolidación del Estado de Derecho.
La deuda estatal de Perú con Alemania asciende a 420 millones de dólares, de los cuales 90 millones corresponden al sector comercial y 330 millones a cooperación financiera bilateral.
De acuerdo con el Banco Mundial, el total de la deuda externa peruana asciende a 22.600 millones de dólares, monto que preocupa al ministro alemán.
En un comunicado oficial, Kinkel hace constar la permanente recuperación económica experimentada por Perú en los últimos cinco años, durante los cuales logró, por ejemplo, reducir la inflación de 7.650 por ciento a un promedio de 10 por ciento.
Perú ha vuelto a ser uno de los principales países con los cuales Alemania mantiene una línea de cooperación para el desarrollo en América Latina, subraya el comunicado.
Kinkel promete un nuevo impulso de inversiones alemanas en el país andino una vez que se haya efectuado la inminente ratificación del tratado de protección de inversiones.
Finalmente, Kinkel elogió los resultados positivos en la lucha contra el terrorismo en Perú y el establecimiento de un Tribunal Constitucional.
El ministro alemán de Cooperación Económica y Desarrollo, Carl- Dieter Spranger, declaró el 25 de junio, tras entrevisatrse con Camet en Bonn, que el gobierno de Fujimori merece el respaldo de la comunidad internacional, porque ha avanzado bastante en la pacificación del país.
Spranger reiteró el respaldo alemán a la mejora de la situación social y económica de amplias capas de la sociedad peruana. (FIN/IPS/rc/ag/ip-if/96