El gobierno de México anunció hoy un programa de apoyo a deudores del sector agropecuario para beneficiar a centenares de campesinos y alentar el desarrollo del campo, donde se concentra 75 por ciento de la pobreza del país.
El programa, el tercero que desde 1995 aplica el gobierno a quienes por la crisis estallada a fines de 1994 no pueden cumplir con el pago de sus créditos, incluye descuentos de hasta 40 por ciento por cancelación oportuna de cuotas, plazos de pago de siete a 10 años e intercambio de deudas de dólares a pesos.
Con el nuevo plan y uno que próximamente será presentado para respaldar a los pequeños empresarios, concluyen los apoyos que el gobierno del presidente Ernesto Zedillo planeó otorgar a los deudores, indicó el secretario de Hacienda, Guillermo Ortiz.
El costo del programa para el sector agropecuario, que según se informó llega a unos 2.000 millones de dólares, será absorbido en partes iguales por el gobierno federal y la banca privada.
Fuentes oficiales señalaron que con el nuevo dispositivo, que estará vigente por una década, se reestructurarán créditos por unos 5.300 millones de dólares.
Desde 1995 el gobierno anunció planes de apoyo a deudores de tarjetas de crédito y péestamos en general, deudores hipotecarios y agricultores.
"Ahora que la economía tiene un respiro, podemos ofrecer un apoyo sustancial al campo y así promover el desarrollo", dijo Zedillo.
José Bonilla, presidente de la Confederación de Productores Rurales, expresó que el nuevo plan impulsará la recuperación de una sector "cada vez más empobrecido".
En octubre de 1995 el gobierno y organizaciones campesinas anunciaron un programa de apoyo al campo. La estrategia incluye descentralización de funciones de la Secretaría de Agricultura, mejoría en los sistemas de producción y comercialización, entrega de créditos y apoyos para mejorar viviendas y escuelas rurales.
Según la promesa oficial, antes de que finalice 1996 el sector agrícola habrá superado su etapa de postración.
El los 21 millones de hectáreas de tierras agrícolas se concentra 75 por ciento de la pobreza extrema en México.
Investigaciones independientes indican que debido a la crisis económica y los problemas climáticos en 1995 se dejaron de sembrar en el país unas 400.000 hectáreas. (FIN/IPS/dc/dg/if/96)
