Representantes de la mutual judía argentina golpeada hace dos años por un brutal atentado en el que murieron 86 personas recibieron este miércoles un subsidio del gobierno de 12 millones de dólares, una cifra menor que la que tenían derecho a reclamar en un juicio pero más segura.
En diálogo con IPS, el presidente de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), Oscar Hansman, dijo que la cifra ofrecida por el Estado es "razonable", ya que los juristas consideraban "muy difícil" obtener del Estado una cifra que represente realmente el daño, que sería mucho mayor.
La elección del camino del subsidio y no del juicio fue criticada por algunos dirigentes de la colectividad judía, que temían que el aporte recibido condicione la independencia de la institución, sobre todo a la hora de reclamar por la falta de esclarecimiento del ataque.
Pero Hansman dijo que la dirigencia de la AMIA, con apoyo de otras instituciones, como la Delegación de Asociaciones Isarelitas Argentinas, consideraron "prudente" resolverlo en esa instancia y no en una legal. La aceptación no significa que no se pueda litigar contra el Estado en un futuro, aclararon.
Del total recibido, 11 millones de dólares serán derivados a asistencia social y educación. En el decreto presidencial se explicita que el dinero no será para la reconstrucción de la sede, ni para los familiares de las víctimas o los vecinos afectados, que recibieron ya indemnizaciones particulares.
Otro millón sera destinado a la creación de un Museo Memoria del Holocausto, que será construído por iniciativa de la comunidad judía local. (FIN/IPS/mv/dg/ip-hd/96