El Comité de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) exhortó al retorno a la democracia en Nigeria y reclamó el fin de las violaciones cometidas por las fuerzas de seguridad en Brasil y en Perú.
El presidente del Comité, el costarricense Francisco José Aguilar Urbina, indicó este viernes que el organismo había expresado su grave preocupación por el mantenimiento del poder militar en el país africano a través de decretos presidenciales.
El método de gobierno en Nigeria, por medio de decretos que implican la suspensión o la abrogación de los derechos constitucionales, es incompatible con el Pacto de Derechos Humanos, dijo el Comité.
Aguilar informó del cuestionamiento del Comité a las numerosas ejecuciones extrajudiciales de líderes políticos e intelectuales perpetradas en Nigeria y a la supresión de la libertad de expresión.
El Comité reclamó al regimen militar de Nigeria la anulación de todos los decretos que revocan o limitan las garantías de derechos fundamentales y de libertades básicas.
En Brasil, el Comité observó serios problemas como los relacionados con asesinatos masivos, en especial de jóvenes, no sólo de los niños de la calle sino también de menores que viven con sus padres pero vagan por las calles de las principales ciudades del país.
Asimismo, refirió Aguilar, los asesinatos de campesinos, la situación vinculada con las minorías, especialmente en la población indígena y en la comunidad negra, que soportan discriminación no sólo de individuos sino también del Estado.
El organismo de la ONU manifestó preocupación porque los miembros de la policía militar acusados de violaciones de los derechos humanos son juzgados por tribunales militares en lugar de jueces civiles.
La magnitud de los problemas del trabajo forzado y de la esclavitud por deudas también causaron inquietud al Comité.
El organismo invitó al gobierno de Brasil a vigilar para que las disposiciones del Pacto de Derechos Humanos se apliquen en todo el territorio del Estado federado.
El Comité demandó al gobierno de Brasilia que adopte medidas inmediatas para prevenir los casos de ejecuciones sumarias y arbitrarias, de torturas, de uso abusivo de la fuerza y de detenciones arbitrarias por las fuerzas de seguridad.
En el caso de Perú, enfrentamos todavía enormes problemas con algunas desapariciones, aunque se debe aclarar que el número de desparecidos ha disminuido sustancialmente en los últimos cuatro años, expresó Aguilar.
El cuerpo de la ONU deploró que el gobierno de Perú no haya ejecutado las recomendaciones que sus miembros le presentaron durante el examen del anterior informe sobre el país sudamericano.
El Comité demandó al gobierno que reexamine la ley de amnistía de 1995, que absuelve a policías, militares y agentes del Estado autores de actos criminales cometidos en el marco de la "guerra contra el terrorismo".
La declaración del organismo de la ONU insistió en que Perú debe adoptar medidas para investigar las denuncias de ejecuciones sumarias, de desapariciones, de torturas y de tratos inhumanos. Los culpables deben ser perseguidos y las víctimas indemnizadas, afirmó.
Finalmente, reclamó que el sistema de "jueces sin rostro" y se restablezca sin dilación el proceso público para todos los acusados, incluidos los implicados en casos de terrorismo.
El Comité, integrado por 18 miembros, concluyó este viernes su segundo período de sesiones del año. En la próxima reunión, en octubre venidero, proseguirá la evaluación del caso de Perú, entre otros temas. (FIN/IPS/pc/dg/hd-ip/96
