Políticos y empresarios de Colombia rechazaron hoy un nuevo impuesto para financiar un plan de emergencia de las Fuerzas Armadas y pidieron la apertura de un debate sobre la utilización del presupuesto militar.
El presidente Ernesto Samper anunció este miércoles que se trata de una contribución que pagarán una sola vez, durante el período fiscal de 1997, las personas naturales que poseean un patrimonio líquido gravable superior a los 88.000 dólares.
Con esta medida se espera recaudar 500 millones de dólares para financiar la creación de nuevas guarniciones militares y el mejoramiento de equipos y de transporte de tropas.
Emilio Lébolo, presidente del máximo órgano de dirección del gobernante Partido Liberal, dijo que el impuesto sería "una carga muy pesada" para los colombianos y que en el país "no hay ambiente para asumir nuevos gravámenes".
El diputado Luis Pérez, también liberal, afirmó que el pueblo está cansado de la "falta de operatividad" de las Fuerzas Armadas, en tanto el senador Samuel Moreno, del izquierdista M-19, dijo que "al país no se le pueden cargar más impuestos" y reclamó una verdadera "política de paz".
El país está necesitando "más inversión para vivir en paz y no inversiones para seguir matándonos", comentó el senador Juan Restrepo, del Partido Conservador, segunda fuerza política de Colombia, país donde según informes oficiales el promedio de muertes violentas asciende a 30.000 anuales.
Pero además, el impuesto colocó al gobierno enfre el fuego cruzado de los empresarios, que piden medidas frente a la recesión económica, y las Fuerzas Armadas que demandan recursos para enfrentar a la guerrilla.
Sabas Pretelt, presidente del Consejo Gremial Nacional (CGN), que reúne a los 15 principales sectores de la producción, advirtió que un nuevo impuesto "reducirá aún más la demanda".
El impuesto, que debe ser aprobado por el Congreso y afectará a 370.0000 contribuyentes, puso en entredicho la eficiencia de las fuerzas militares, que reciben 16,4 por ciento del presupuesto nacional, frente a 7,9 destinado a salud, educación y servicios.
El presidente de la Asociación Bancaria, César González, dijo que lo urgente es "hacer un juicio a la eficiencia de las Fuerzas Armadas", ya que al contribuyente "no sólo se le está maltratando sino que se le oculta la verdad sobre la utilización de los impuestos que paga".
El único sector del empresariado que apoyó la medida fue la Federación de Ganaderos de Colombia, que denunció que más de la mitad de las 700 personas secuestradas en el país son hacendados que se encuentran mayoritariamente en poder de la guerrilla.
Con el plan de emergencia, según el comandante de las Fuerzas Militares, general Holdan Delgado, el ejército hará frente a la guerrilla en zonas actualmente desprotegidas. (FIN/IPS/yf/ag/ip/96