El líder serbobosnio Radovan Karadzic, acusado de crímenes contra la humanidad, abandonó hoy formalmente la vida política, cercado por el diplomático estadounidense Richard Holbrooke y el presidente de Serbia, Slobodan Milosevic.
Karadzic firmó una declaración en la que puso fin a su "vida pública y política" después de una noche entera de negociaciones telefónicas que mantuvo desde su bastión en Pale con Holbrooke, quien se hallaba en la residencia de Milosevic, cerca de Belgrado.
Milosevic y otros líderes tuvieron en sus manos el documento firmado por Karadzic en Pale, en la denominada Republika Srpska, entidad controlada por fuerzas serbias en territorio de Bosnia- Herzegovina y sin reconocimiento internacional.
Karadzic renunció formalmente a la "presidencia" de la Republika Srpska y a su liderazgo en el gobernante Partido Democrático Serbobosnio (SDS).
No solo abandonó esos cargos, sino también "todos los poderes asociados con ellos", dijo Holbrooke después de 10 horas de negociaciones telefónicas.
"El doctor Karadzic estableció que se retirará inmediata y permanentemente de todas sus actividades políticas. No aparecerá en público, en radio, en televisión o en ningún medio de comunicación, ni participará de ninguna manera en elecciones", explicó Holbrooke.
El sucesor de Karadzic como presidente hasta las elecciones en Bosnia-Herzegovina previstas para el 14 de septiembre será otro nacionalista serbobosnio de línea dura, Biljana Plavsic. La presidencia del SDS, en tanto, caerá en manos del "canciller" Aleksa Buha.
Milosevic, Buha, Plavsic y el portavoz del parlamento serbobosnio, Momcilo Krajisnik, siguieron atentamente las negociaciones durante toda la madrugada.
El jefe de seguridad de Milosevic, Jovica Stanisic, fue encomendado por Milosevic para viajar a Pale este jueves y asegurarse de que las renuncias se hicieran efectivamente como fueron negociadas.
De acuerdo con fuentes serbobosnias, un helicóptero del gobierno de Serbia llevó a Stanisic a Pale y trasladó desde allí a Krajisnik, Buha y Plavsic hacia Belgrado.
Cuando las negociaciones concluyeron, el acuerdo fue enviado por fax a Pale, donde Stanisic fue testigo de la firma del documento por parte de Karadzic. Luego, el funcionario llevó la renuncia a Milosevic y Holbrooke en Belgrado.
"Esta declaración está aun lejos de nuestra meta de que Karadzic y el jefe del ejército serbobosnio, general Ratko Mladic, comparezcan ante el Tribunal Internacional de Crímenes de Guerra en La Haya", dijo Holbrooke.
"Los acusados por crímenes de guerra deben ir a La Haya a enfrentar un juicio en condiciones adecuadas, pero este es un camino largo y escarpado", agregó el diplomático estadounidense.
El acuerdo de paz de Dayton establece que los acusados o convictos por el Tribunal Internacional de Crímenes de Guerra en la antigua Yugoslavia en La Haya se verán impedidos de presentarse como candidatos a cargos electivos o de ser designados a cualquier puesto público.
Holbrooke, el rudo ex subsecretario de Estado de Estados Unidos que renunció a su cargo para tomar un empleo en una corporación financiera después de lograr en Dayton una frágil paz para Bosnia- Herzegovina, fue encomendado a volver a la antigua Yugoslavia para acabar con la actual crisis.
Las partes apelaron a Holbrooke para que aplicara las mismas duras técnicas de negociación con las que logró la firma del acuerdo de Dayton el año pasado. El diplomático llegó a amenazar a Milosevic que se restaurarían las sanciones económicas contra la República Serbia si Karadzic no renunciaba.
Holbrooke admitió que "no existen garantías" de que Karadzic se mantenga en el futuro alejado del poder.
"Tenemos la declaración firmada y Milosevic fue testigo. En nuestra experiencia, si el presidente Milosevic es testigo y controla, todo va bien. Pero si no, no. Si la declaración no se implementa, se reimpondrán la presión y las sanciones" sobre Serbia, advirtió Holbrooke.
"Espero no tener que verlos nunca más", dijo con seguridad el diplomático a los periodistas en Belgrado.
Observadores en Belgrado afirmaron que éste es, efectivamente, el final de la vida política de Karadzic. El gobernante Partido Socialista de Serbia (SPS), de Milosevic, fundó una rama para que actúe en Bosnia-Herzegovina y neutralice al SDS.
"Milosevic cree que los socialistas bajo su control garantizarán la paz en la República Srpska y serán una mejor opción a los ojos del mundo", dijo Ivan Torov, analista del diario independiente Nasa Borba.
Que Karadzic concurra a La Haya es otro asunto, pero sacarlo de la vida pública podría ser el primer paso en esa dirección.
Radovan Karadzic nació en Montenegro y en su vida antes de la guerra era célebre como psiquiatra y asesor médico del equipo de fútbol de Sarajevo. No tenía tanta fama como poeta, aunque publicó tres libros de versos. (FIN/IPS/tra-en/vpz/rj/mj/ip/96