El presidente de Paraguay, Juan Carlos Wasmosy, podría enfrentar un juicio político similar al que fue sometido el ex mandatario brasileño Fernando Collor, luego de las graves acusaciones formuladas hoy en el Congreso por el ex jefe militar Lino Oviedo.
Oviedo, quien protagonizó una frustrada sublevación el 22 de abril cuando fue relevado de la Comandancia del Ejército por Wasmosy, dijo que el mandatario paraguayo lo había impulsado a dar un golpe de Estado "al estilo (del presidente Alberto) Fujimori en Perú".
Consultados varios parlamentarios al término de la audiencia sobre si correspondería un proceso a Wasmosy en base a las acusaciones de Oviedo, varios de ellos aseguraron que el presidente necesariamente tendrá que dar la cara.
A raíz de los hechos de abril, Oviedo fue llamado este miércoles por la Comisión Bicameral de Investigaciones del Congreso, ante la que declaró durante más de seis horas.
Al concluir, pronunció un encendido discurso de media hora ante sus partidarios, que lo aclamaron frente a la sede del Congreso.
Wasmosy "me propuso cerrar el parlamento al estilo 'fujimorazo', porque sólo así podríamos realizar los proyectos de inversión y una vez contento el pueblo tendríamos el apoyo suficiente para hacer una nueva Constitución y, en base a eso, un nuevo Poder Judicial", dijo Oviedo ante los legisladores.
El ex hombre fuerte del Ejército añadió que Wasmosy le había propuesto luego su pase a retiro para influir en las cruciales elecciones internas del gobernante Partido Colorado del 28 de abril, en las que triunfó José María Argaña, el candidato más cercano al ex dictador Alfredo Stroessner (1954-89).
Como Oviedo se habría mostrado reticente, aseguró que Wasmosy remató la entrevista con la siguiente frase: "si esto no te gusta, hacé vos el golpe de Estado, quedándote como presidente de una Junta Militar como hizo (el general chileno Augusto) Pinochet" en 1973.
El ex jefe militar paraguayo dijo también que ante la supuesta propuesta de Wasmosy de cerrar el parlamento reaccionó indignado, manifestándole su "total disconformidad".
Oviedo añadió que en reiteradas oportunidades había expresado ante personalidades paraguayas y extranjeras, entre las que mencionó al nuncio apostólico José Sebastián Laboa, que "jamás haría un golpe de Estado, ni permitiría que se hiciera un golpe de Estado".
Durante toda su larga declaración en el Congreso, Oviedo dejó entender que el supuesto golpe de Estado sólo existió en la fantasía del presidente paraguayo.
En la etapa de preguntas y respuestas ratificó su inocencia, aunque no pudo responder de manera satisfactoria varias preguntas a los congresistas.
Durante la sesión, el parlamentario opositor Luis Alberto Mauro, vicepresidente del Encuentro Nacional, tercera fuerza política paraguaya, hizo notar la contradicción entre las declaraciones de Oviedo y las de uno de sus principales operadores, el ex magistrado José Francisco Appleyard.
Ambas declaraciones se contradicen sobre la redacción de un comunicado para desmentir a Wasmosy, quien había asegurado en la tarde del lunes 22 de abril que Oviedo se había insubordinado ante su decisión de pasarlo a retiro.
Según Oviedo, el comunicado fue dejado de lado porque no se "podía contradecir la voz oficial del Comandante en Jefe (el presidente de la República), de acuerdo a la disciplina militar".
Appleyard sostuvo, en cambio, que la redacción del communicado fue dejada de lado cuando llegó la comunicación de que Wasmosy había renunciado a la Presidencia.
En otra candente pregunta sobre si había exigido o no la renuncia del presidente y del vicepresidente para que asumiera el titular del Congreso, el ex jefe militar se abstuvo de responder escudándose en un consejo de sus asesores legales.
El parlamentario opositor Hermes Rafael Saguier indicó que ahora más que nunca era necesaria la comparecencia de Wasmosy para aclarar la situación, porque de otro modo el único camino que le quedaba al Congreso paraguayo era promoverle un juicio político por mal desempeño de sus funciones.
El diario Noticias de Asunción anticipó que en su edicion de este jueves publicará declaraciones de Wasmosy en las que se compromete a aclarar las acusaciones formuladas por el ex comandante del Ejército.
Oviedo remató su larga exposición ante el Congreso diciendo que el verdadero "chaque" (expresión en guaraní que significa cuidado, alerta), no era el supuesto golpe de Estado sino la corrupción y "el deseo de entregar el país a las transnacionales". (FIN/IPS/ct/ag/ip/96)