El plan de la Comunidad del Caribe (Caricom) en apoyo de la alfabetización en Haití permanece empantanado, debido al fracaso de la campaña financiera lanzada entre las empresas privadas de la región.
El proyecto comprende la impresión de 50.000 manuales de enseñanza para ayudar a millones de haitianos a aprender a leer y escribir, y tiene un costo entre 85.000 y 100.000 dólares, que la Caricom se proponía obtener de donaciones privadas.
Se trata del primero de una serie de planes previstos por los 14 países de Caricom en apoyo de Haití, un país de 6,9 millones de habitantes con una tasa de analfabetismo de 80 por ciento.
Pero sólo 9.000 dólares fueron recaudados desde el lanzamiento del plan en febrero de 1995. Mientras un banco ofreció 140 dólares, la filial en Guyana de la compañía británica Courts PLC rechazó el pedido de fondos realizado por los líderes de la región, y otras empresas no respondieron.
"Es asombrosa la distancia que la población de esta parte del mundo parece marcar con los países de idioma ajeno al inglés", observó un funcionario de la Caricom.
"La educación es como el oro" para la población de Haití, advirtió el jefe de Asuntos Exteriores de la Caricom, Orlando Marville.
Haití tiene el estatuto de observador ante la Caricom, una organización regional radicada en Georgetown.
El secretariado de la Caricom considera asistir a Haití con un amplio programa, que sería financiado por donantes externos y tendría magnitud semejante a los planes de ayuda dispuestos para las naciones de la región afectadas por huracanes.
Al plan de ayuda para alfabetización seguiría asistencia en materia de salud y de producción agrícola.
Haiti, que comparte con República Dominicana la isla la Española, es el país más pobre del área del Caribe. El desempleo llegó en 1994 a 85 por ciento de la población activa y el ingreso por habitante se situó en 100 dólares al año.
El analfabetismo aumentó durante el régimen militar del general Raoul Cedras (1991-1994), cuando el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo suspendieron sus préstamos a Haití.
La matriculación en el sistema de enseñanza era en 1991 de 40 por ciento de la población entre seis y 17 años.
Cedras, que había derrocado a Jean-Bertrand Aristide, un presidente surgido de elecciones libres, resistió las sanciones impuestas a su régimen por las Organizaciones de Naciones Unidas y de Estados Americanos.
Finalmente, fue depuesto por tropas de Estados Unidos, en septiembre de 1994. (FIN/IPS/tra-en/bw/cb/ff/cr/96)