El gobierno de Brasil no pudo presentar un documento oficial en la conferencia Hábitat II, que se inició hoy en Estambul, al ser rechazado por organizaciones de la sociedad civil que debían participar en su elaboración.
Grazia de Grazia, asesora de la Federación de Organismos para la Asistencia Social y Educativa, dijo que el gobierno del presidente Fernando Henrique Cardoso debía haberlos convocado en 1994, pero que no lo hizo hasta setiembre del ano pasado.
"La consecuencia fue un documento que la sociedad civil no comparte y que nos negamos a firmar", dijo.
Por este motivo, Brasil no pudo aportar de manera independiente a la elaboracion de un documento global, tal como pretendía la Organizacion de las Naciones Unidas (ONU), promotora de la conferencia, y tuvo que resignarse a adherir a la postura general de América Latina y el Caribe, apuntó Grazia.
En contrapartida, 130 organizaciones de la sociedad civil brasileña, en las que se encuentra la Conferencia Nacional de Obispos, organizaron un Foro Nacional de Reforma Urbana, del 9 al 12 de marzo pasado, que "resulto todo un exito", señaló.
Las conclusiones de ese encuentro, que fueron enviadas a Hábitat II, subrayan la necesidad de poner fin a los desalojos forzados en las áreas urbanas populares, combatir el desempleo y viabilizar presupuestos participativos en todos los municipios brasileños.
De Grazia indicó que uno de los temas más polémicos de Hábitat II será el referido al derecho a la vivienda.
Al respecto, recordó que en Brasil las organizaciones no gubernamentales reunieron un millón de firmas para avalar ante el Congreso la propuesta de creación de un Fondo Nacional de Vivienda Popular, pero el proyecto fue archivado tras la llegada de Cardoso a la Presidencia. (FIN/IPS/jg/ag/pr/96)
