Al permitir abusos de autoridad, torturas y malos tratos a detenidos por parte de la policia, Portugal sigue en las "listas negras" de derechos humanos e incurre en "una clara violación de acuerdos y convenios internacionales".
La grave acusación pertenece al portugués Manuel de Almeida Santos, miembro de la presidencia de Amnistía Internacional (AI), quien la formuló al comentar este miércoles el informe anual 1995 que la organización humanitaria independiente con sede en Londres divulgó en la víspera.
AI acusa a la policía portuguesa de aplicar a detenidos "puntapiés, bastonazos, golpes, torturas y malos tratos".
Según Almeida Santos, "los procesos de investigación" de las denuncias presentadas contra la policía "son lentos e inconclusos", lo que deja la "sensacion de impunidad" ante los actos ilegales de los agentes.
El informe de AI destaca a Portugal como el único entre los países europeos libres de conflicto armado en que los derechos humanos son sistemáticamente violados por la policía.
La lista de AI también incluye a España y Gran Bretaña, entre los estados miembros de la Unión Europea, pero en esos casos existen movimientos separatistas armados: ETA, en el País Vasco, y el IRA, de Irlanda del Norte, que resiste el dominio británico.
Amnistía exigió a las autoridades portuguesas que promuevan investigaciones "rapidas y exhaustivas", y que los responsables de la violación de derechos humanos "sean presentados a la justicia", dijo Almeida Santos.
Recordó a renglón seguido que Lisboa es signataria de convenios europeos e internacionales sobre derechos humanos, pero no los cumple.
"El gobierno debe pasar a la práctica" y aplicar inmediatamente las disposiciones de esos acuerdos, porque "los años pasan y las situaciones permanecen sin haber mejoría", concluyó Almeida Santos. (FIN/IPS/mdq/ff/hd/96).