Costa Rica desea obtener la cooperación de asesores alemanes para acelerar la adecuación de su producción agropecuaria a los desafíos de la apertura económica, informó el ministro costarricense de Agricultura y Ganadería, Roberto Solórzano.
La experiencia de Alemania en la transformación en sistema de libre mercado del régimen de planificación central que imperaba en la región oriental del país hasta la desaparición de la República Democrática Alemana, es muy valiosa para Costa Rica, declaró el ministro a IPS en Bonn, antes de seguir viaje a Roma.
Alemania posee también experiencia en la privatización y reconversión de establecimientos agropecuarios y asistencia tecnológica a los mismos, explicó Solórzano.
El ministro costarricense visitó Alemania oficialmente del 4 al 16 de este mes, al frente de una delegación de funcionarios gubernamentales y de dirigentes de sindicatos y cooperativas de pequeños productores del campo.
Solórzano explicó que Costa Rica ingresó hacia 1990 en el GATT (Acuerdo General de Aranceles y Comercio, sustituido en 1995 por la Organización Mundial de Comercio), y realiza ahora una profunda transformación para hacer frente a las reglas del neoliberalismo imperante casi en el mundo entero.
Agregó que, en cuanto a la apertura comercial, Costa Rica y Alemania coinciden en que debe aplicarse en cada caso de modo gradual.
Solórzano se entrevistó en Alemania con representantes del Ministerio de Agricultura, de todos los partidos políticos, de asociaciones de agricultores, cooperativas, con productores de carne y leche y con dirigentes de la Fundación Friedrich Ebert, allegada al opositor Partido Socialdemócrata.
Visitó Berlín, Hannover y Bonn y, por último, visitó en Colonia un congreso organizado por TransFair, una organización no gubernamental (ONG) de fomento de la libre competencia en el comercio mundial.
TransFair cuenta con el apoyo de varias ONG, de los patronatos "Misereor", de la Iglesia Católica, y del Servicio Eclesiástico de Desarrollo, de la Iglesia Evangélica.
La exportación de productos agropecuarios de Costa Rica creció de 1.000 a 1.700 millones de dólares desde 1990 hasta 1995, sin incluir las ventas de la agroindustria.
Pero el ministro puntualizó que no todo es color de rosa. La apertura económica determinó a Costa Rica, que se autoabastecía de arroz, a comprar el grano en el extranjero, pues le resultaba menos costoso que producirlo.
Pero hoy debe pagar precios exhorbitantes por el arroz, un producto básico de la dieta popular. Otro tanto ocurre con el maíz y el frijol.
Solórzano elogió la labor de TransFair, que en los últimos cinco años logró vender "a precio justo" en Alemania 10 por ciento de la producción de café de Costa Rica.
Alemania es el mayor importador y consumidor de café latinoamericano en Europa, incluído el costarricense.
El ministro de Economía del estado de Renania del Norte- Westfalia, Wolfgang Clement, presente en Colonia a la inaugración del congreso "Compartir el futuro – Comerciar con justicia", reiteró el apoyo de su gobierno regional a las organizaciones que fomentan la venta a "precio justo" en Alemania de productos del Sur.
De ese comercio se benefician en Alemania productores de café, banano, cacao, té, algodón, vestido, miel.
El socialdemócrata Clement confirmó el nombramiento en Renania del Norte-Wastfalia de 25 promotores de ese tipo de comercio, que comenzarán su tarea en cuanto entre en vigor el presupuesto ya aprobado.
Solórzano destacó que a partir de los años 80, los precios de los productos manufacturados aumentaron 60 por ciento, mientras la cotización de las materias primas exportadas sobre todo por los países en desarrollo se debilitaba 70 por ciento.
Frente a esa situación, el gobierno costarricense apuesta por los mercados alternativos, como el que ofrece TransFair, que se presenta como herramienta para romper ese círculo vicioso.
Entre otros, intervinieron en el congreso representantes del Instituto Alemán de Política de Desarrollo, del Sindicato Textil y del Vestido, de las asociaciones defensoras de Derechos Humanos FIAN y German Watch, y una veintena de organismos no gubernamentales dedicados a fomentar el desarrollo del Tercer Mundo.
Las ponencias señalaron la injusta distribución del trabajo en el mundo, el trabajo invisible de la mujer y el niño en los sectores formal e informal, la agricultura sostenible y nuevas alternativas del comercio a precio justo.
Una delegación pluripartidista del parlamento de Alemania visitará a finales de julio Costa Rica y otros países de América Central. (FIN/IPS/rc/ff/dv/96)
