El interés de Venezuela por la integración con el norte de Brasil será subrayado con las visitas que su presidente, Rafael Caldera, efectuará a dos capitales de esa región, Manaos y Boa Vista, los días 22 y 23.
Caldera viajará a Brasilia para revisar con su par Fernando Henrique Cardoso una agenda bilateral de 15 temas, buena parte de ellos referida a la integración de sus regiones de frontera.
El mandatario, de 80 años, ha limitado sus viajes e incluso faltó hace dos meses a una cita de presidentes andinos en Perú, pero subraya el interés venezolano por el norte brasileño al extender su visita hasta capitales de provincia.
La búsqueda de integración entre el norte de Brasil y el sur de Venezuela "es lo natural, ambos países estaban desechando oportunidades y las dos regiones son complementarias", dijo a corresponsales extranjeros en Caracas el embajador brasileño Clodoaldo Hugueney.
Del lado venezolano hay una industria pesada (hierro, acero y aluminio) mientras en el brasileño se abre paso una industria liviana. Venezuela tiene petróleo y electricidad, dos energéticos escasos en el orte de Brasil, recordó Hugueney.
Caldera presenciará en Manaos la inauguración de una planta de cementos que puede aprovisionarse con el producto a granel desde el oriente de Venezuela, así como los trabajos de pavimentación de la carretera BR-174, que enlaza Manaos con Boa Vista.
Desde 1995, un centenar de camiones cruza la selvática frontera cada semana, avivando un comercio que los gobiernos esperan acompañar con intercambios en las áreas de energía, minería y turismo, además de la cooperación exigida por intereses compartidos en ambiente y seguridad
Las relaciones entre Brasil y Venezuela fueron por años un frente descuidado dentro del tejido regional, por la atención brasileña hacia el Cono Sur y la venezolana hacia el flanco andino, América Central y el Caribe.
Pero en marzo de 1994, el entonces presidente de Brasil Itamar Franco fue el primer mandatario que visitó Venezuela al inicio de la segunda presidencia de Caldera, se estableció una comisión binacional para la cooperación, y los gobernantes decidieron reunirse por lo menos una vez cada año.
Caldera fue a Brasil en septiembre de 1994, Cardoso llegó a Caracas en julio de 1995, y ahora el mandatario venezolano devuelve el gesto.
Entretanto, la comisión binacional ha trabajado mediante 11 grupos por áreas: comercio e integración, energía, transportes, minería y siderurgia, medio ambiente, desarrollo fronterizo, ciencia y tecnología, comunicaciones, planificación, agricultura y minería ilegal.
De ese modo, la agenda bilateral se ha enriquecido y Caldera y Cardoso pasarán revista a una quincena de temas, comenzando por negociaciones para sumar Venezuela -y los demás países andinos- al Mercado Común del Sur (Mercosur) que integran Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay.
Sigue luego la cooperación entre los consorcios petroleros estatales, Petrobras y Petróleos de Venezuela (PDVSA), que ha comenzado con una intensificación del comercio de hidrocarburos.
PDVSA duplicó en 1995 su exportación a Brasil -que hasta entonces tuvo un promedio histórico de 280 millones de dólares por año- llevándola a un promedio superior a 100.000 barriles diarios, que dejan entre 600 y 700 millones de dólares anuales.
Con Petrobras, se estudia la construcción de una refinería e el norte o el nordeste de Brasil, que procesaría unos 180.000 barriles diarios de crudo, principalmente venezolano, y costaría al meos 1.500 millones de dólares, recordó Hugueney.
Según fuentes empresariales, los ejecutivos de PDVSA se quejan de que Brasil "tiene un discurso diplomático abierto a la asociación, pero luego no concreta y se cierra en posiciones proteccionistas", por lo que el nuevo diálogo Caldera-Cardoso debería desbloquear esa negociación.
Otro proyecto energético es llevar electricidad desde la represa venezolana de Guri, 550 kilómetros al sureste de Caracas y con capacidad de 10.000 Megavatios, hasta el norte de Brasil, con financiamiento multilateral para el tendido de líneas.
El tema de trasporte destaca en la agenda por su asociación con el comercio, el turismo, el intercambio cultural, la vigilancia ambientalista y contra la minería ilegal y el narcotráfico, así como por la posibilidad de explotaciones y negocios de minería y siderurgia.
Prioridades en el tema son la pavimentación de 200 kilómetros de carretera entre Caracarai y Boa Vista, en el estado brasileño de Roraima, y el establecimiento de rutas aéreas regionales entre el sur de Venezuela y el norte de Brasil.
En materia de seguridad, los mandatarios revisarán la cooperación militar y policial frente a la minería ilegal y el tráfico de drogas en sus zonas de frontera, y la inserción de Venezuela en el programa brasileño de vigilancia satelital de la Amazonia.
El examen del comercio resultará satisfactorio, por su incremento, pues pasó de 600 millones de dólares a fines de los años ochenta, a 822 millones en 1994 y 1.222 millones en los 11 meses de enero-noviembre de 1995.
Pero el incremento -animado por ventas de petróleo y los camiones que cruzan el único punto de contacto carretero en 2.000 kilómetros de frontera- ha llevado un desbalance comercial en favor de Venezuela: 239 millones de dólares en 1994 y 324 en 1955.
Los principales productos que Brasil exporta a Venezuela son automóviles (material CKD para ensamblaje), laminados y otros productos de hierro y acero, productos químicos y de computación.
Venezuela, aparte de petróleo, vende productos petroquímicos, vidrios, derivados de cobre y plomo, pescado congelado y cemento.
Caldera, además de reunirse con Cardoso y firmar documentos que impulsen la cooperación y el comercio, visitará el Supremo Tribual Federal y el parlamento de Brasil, así como la Universidad de Brasilia, donde dictará una conferencia.
En Manaos visitará el Instituto de Investigaciones Amazónicas, develará un busto del libertador Simón Bolívar junto a la carretera BR-174, y acudirá a un concierto de la Orquesta Sinfónica Infantil de Venezuela en el teatro Amazonas
En Boa Vista, Caldera visitará el batallón Simón Bolívar del ejército brasileño y presenciará la firma de acuerdos entre autoridades de Roraima y el fronterizo estado venezolano de Bolívar, tras lo cual regresará a Caracas. (FIN/IPS/hm/dg/ip-if-la/96)
