Los delegados de Trinidad y Tobago a la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Asentamientos Humanos plantearán una preocupación opuesta a la tendencia mundial: el éxodo desde las ciudades a las áreas urbanas, el cual amenaza los escasos recursos naturales del país caribeño.
Las autoridades de Trinidad y Tobago enfrentan el desafío de encontrar soluciones para la migración masiva desde las ciudades hacia el campo, y presentarán su inquietud ante la "Cumbre de la Ciudad", a realizarse en Estambul entre el 3 y el 14 de junio.
Al igual que la mayoría de los países del mundo, la tendencia en los países del Caribe es a la sobrepoblación en las ciudades. En Jamaica, por ejemplo, la infraestructura de Kingston no tiene cabida para la avalancha de personas provenientes del medio rural que llegan en busca de empleo y oportunidades.
Más de 900.000 personas vivien en Kingston y sus alrededores, mientras la población total de Jamaica es de 2,5 millones de personas.
Pero en Trinidad y Tobago, Puerto España y la ciudad industrial de San Fernando están perdiendo gradualmente su población, la cual se dirige "a los espacios abiertos del centro del país", dijo el ministro de Vivienda, John Humprey.
La tendencia a dejar la ciudad para dirigirse a las áreas rurales no es nueva, indicaron autoridades, pero las cifras de migrantes aumentan gradualmente.
Desde comienzos de esta década, la gente se vuelca a los distritos cercanos a la ciudad, donde el gobierno inició un programa ad hoc de construcción de viviendas, y donde es más fácil realizar ocupaciones ilegales de tierras que en las cercanías de Puerto España.
En 1991, había 33 comunidades que ocupaban tierras en el centro azucarero de la isla de Trinidad. Estimaciones no oficiales situaron el número de ocupantes en unos 80.000 (6,5 por ciento de la población), aunque las cifras del gobierno lo situaron en 40.000.
Los recién llegados a las áreas rurales han creado grandes problemas. En esas zonas es alto el desempleo, que tiene un índice de 20 por ciento en el país.
Las áreas rurales no tienen tantas escuelas como las ciudades y los servicios tampoco son suficientes, en especial se nota la carencia de teléfonos y abastecimiento de agua potable.
Las autoridades temen que el fenómeno implique una pérdida de ganancias para las zonas urbanas que quedan más despobladas, y planifican poner en práctica un sistema en que los habitantes de Trinidad y Tobago "posean una parcela de tierra", dijo Humprey.
Un nuevo proyecto de ley estudia la venta de tierras estatales a percios accesibles a la población. El gobierno, indicó Humprey, se propone enfocar el problema de la migración de la ciudad al campo con un sistema vial que mejore el acceso a las áreas que reciben el mayor número de nuevos pobladores.
Uno de los motivos citados por la gente para dejar las ciudades es el alto índice de crímenes. En los primeros cuatro meses de 1996, 25 personas fueron asesinadas y se informó sobre 76 violaciones y 1.300 hurtos.
El total de crímenes serios cometidos en el primer trimestre de 1995 alcanzó 3.201. La cifra para igual período este año se situó en 3.510. (FIN/IPS/tra-en/wg/cb/lp/pr/96)