Cancilleres y viceministros de las 14 naciones del Grupo de Río iniciaron hoy en Cochabamba, 370 kilómetros al este de La Paz, su XV reunión ordinaria con el fin de "encontrar un seguro para la democracia" en el continente.
Los recientes acontecimientos de Paraguay, que pusieron en riesgo la continuidad del sistema democrático, concentraron la atención de las autoridades que arribaron a esta ciudad con la misión de organizar la agenda de la X cumbre del Grupo de Río, que se efectuará en Cochabamba entre agosto y septiembre.
El tema de la búsqueda de "un seguro para la democracia" en el continente fue planteado por el presidente de Bolivia, Gonzalo Sánchez de Lozada, en la inauguración del encuentro.
"Es interesante notar que tenemos muchos seguros para las inversiones, que en una etapa se consideraba que era posiblemente (una) invasión a la soberanía de nuestros países, pero no tenemos un mecanismo puntual, claro, esencial, de defensa del sistema democrático", señaló.
Sánchez de Lozada dijo estar consciente de que no será una tarea fácil por la prevalencia del principio de la autodeterminación de los pueblos, que debe guiar todos los actos de las naciones.
Pero el proceso democrático en el continente, que "parecía inviolable", está enfrentando dificultades también con los ajustes estructurales y las reformas del Estado de segunda generación.
"Deberíamos esforzarnos por crear un instrumento, una actitud, que realmente dé seguridad de que va a haber un apoyo de todo el continente al proceso democrático", insistió Sánchez de Lozada.
También el canciller boliviano, Antonio Araníbar, secretario pro témpore del Grupo de Río, resaltó el valor de este mecanismo de consulta y concertación política de América Latina y el Caribe en la reafirmación de los procesos democráticos de la región y sus esfuerzos por la pacificación.
En ese sentido, dijo que para el respeto de los derechos humanos y el fortalecimiento de los sistemas políticos democráticos el Grupo de Río debe inspirarse en el papel pacificador que jugó en América Central y la resolución de crisis político-institucionales internas.
El canciller de Paraguay, Rubén Darío Melgarejo Lanzoni, nombrado tras los incidentes de abril en su país, dijo que Asunción acoge con muy buenos ojos la propuesta de Sánchez de Lozada de crear un seguro para la democracia en el continente.
En su primera actuación oficial en el exterior de su país, Melgarejo Lanzoni agradeció a los países de América Latina y el Caribe la solidaridad, el apoyo y el respaldo unánime que expresaron a Paraguay tras la insubordinación del jefe del Ejército Lino Oviedo.
"Paraguay puede afirmar hoy con orgullo que su proceso hacia la democracia ha dado un salto cualitativo hacia su fin deseado", dijo.
Aseguró que desde 1936, cuando las Fuerzas Armadas se hicieron del poder e implantaron una dictadura, esta fue la primera vez que un civil (el presidente Juan Carlos Wasmosy) impuso su voluntad republicana y el respeto a la institucionalidad democrática.
"En este continente ya no hay espacio para aventuras totalitarias ni para sistemas que precluyan o conculquen las libertades y los derechos fundamentales de nuestros pueblos", estimó.
La reunión de los cancilleres cobró especial relevancia porque coincide con la primera década de funcionamiento del Grupo de Río.
En una breve evaluación de este proceso, el canciller Araníbar expresó que el nivel de confianza y diálogo visible entre los países del Grupo durante estos diez años es importante pero insuficiente.
"Nuestra región necesita de más transparencia para su seguridad. Necesitamos superar nuestros resquemores y dudas, creando el clima adecuado para solucionar los asuntos pendientes entre nuestros países", afirmó.
Para el secretario pro témpore, el Grupo de Río tiene la responsabilidad de enarbolar la causa integracionista de América Latina y el Caribe, a través del lanzamiento del proyecto de un espacio económico latinoamericano y caribeño.
A la reunión, que concluirá este martes, asisten los cancilleres de Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, México, Paraguay, Perú y Venezuela.
Las otras naciones integrantes del Grupo de Río (Argentina, Chile, Panamá, y Uruguay, además de Costa Rica, en representación de América Central, y Trinidad y Tobago, por el Caribe) están representadas por viceministros de Relaciones Exteriores. (FIN/IPS/jcr/dg/ip/96)