El líder del Movimiento de Resistencia Islámico (Hamas) Musa Abu Marzook tiene pocas posiblidades de estar en Israel el próximo milenio, a pesar de la decisión de su deportación, tomada por el poder judicial de Estados Unidos.
La deportación de Marzook fue ordenada la semana pasada por el juez de corte de distrito Kevin Duffy, pero el abogado defensor, Santley Cohen, estimó que "la próxima fase llevará entre cinco y ocho años".
Mientras, el Servicio de Inmigración y Naturalización de Estados Unidos (INS) mantiene a Marzook en una celda de Nueva York.
El gobierno de Estados Unidos ha deseado la expulsión de Marzook, alegando que es una amenaza al frágil proceso de paz entre Israel y Palestina.
El primer ministro israelí, Shimon Peres, ha solicitado que Marzook sea juzgado en Israel por su supuesto vínculo con los ataques terroristas de Hamas contra la población de ese país.
Días después de la decisión de Duffy, la Corte Circuital de Nueva York estableció que Marzook tiene derecho a presentar un recurso de habeas corpus -el procedimiento que permite a los acusados apelar el fallo del juez de distrito para lograr el juicio de una alta corte.
Cohen afirma que la interposición del recurso extendería la estadía del líder de Hamas en Estados Unidos durante varios meses.
Si la Corte Circuital de Nueva York permite a Marzook el recurso de habeas corpus, habrá otro juicio, que se prolongaría durante unos años. Incluso si esto fracasa, Cohen está preparado para llevar el caso ante la Suprema Corte.
Casos similares de extradición, como el del acusado miembro del Ejército Republicano Irlandés (IRA) Joseph Doherty, quien fue extraditado a Gran Bretaña tras un proceso de ocho años, indica que Marzook podría tener varios niveles de apelación antes de que Israel lo reclame.
Pero, aunque Marzook gane la apelación, el gobierno de Estados Unidos puede simplemente replantear la solicitud de su extradición, señaló Mary Ramadan, directora del Comité Americano- Arabe contra la Discriminación (ADC), con sede en Washington.
"Esto podría proseguir indefinidamente", dijo Ramadan, y añadió que el principal problema en los casos de extradición es que ningún juez tiene el poder de tomar una decisión vinculante sobre el poder ejecutivo.
Como resultado, si Estados Unidos realmente quiere a Marzook en Israel, como la Casa Blanca ha indicado directamente, podría ignorar cualquier decisión judicial y simplemente solicitar su extradición nuevamente, consideró la activista.
Marzook permanecerá detenido sin derecho a una fianza por otros meses, mientras se presenta el recurso de habeas corpus. Algunos líderes árabes sostienen que el suyo es un destino peculiar, ya que es considerado un moderado dentro de Hamas.
El dirigente, quien se opuso a la campaña de bombardeos contra Israel de comienzos de este año, en la que murieron 63 israelíes, residió en Virginia durante los últimos 14 años.
Pero el juez Duffy niega que Marzook esté alejado del ala militar del movimiento islámico. En su fallo, dijo que hay evidencias más que suficientes de que el líder participó en "la conspiración llamada Hamas", y que la extradición de Estados Unidos sería válida. (FIN/IPS/tra-en/fah/yjc/lp/ip/96)