Con el atuendo de Batman baja de un helicóptero, canta boleros en medio de sus apasionados discursos y prepara personalmente sus mensajes en los medios de comunicación. Esa es la forma de hacer y entender la política de Abdalá Bucaram, candidato a la presidencia de Ecuador.
"El Loco" Bucaram, como se conoce a este personaje de la política ecuatoriana, lleva ya tres campañas presidenciales con el populista Partido Roldosista Ecuatoriano y es el más experimentado entre todos los aspirantes.
Bucaram empata técnicamente con dos candidatos de centroizquierda, Freddy Ehlers, del movimiento Nuevo País, y Rodrigo Paz, de la Democracia Popular, según las últimas encuestas divulgadas con vistas a las elecciones del próximo domingo.
En primer lugar se encuentra Jaime Nebot, del derechista Partido Social Cristiano (PSC), quien también se postula por tercera vez a la presidencia.
Con base en la tendencia de los votantes en pasados comicios, los analistas creen que Bucaram tiene buenas posibilidades de pasar a la segunda ronda electoral, a realizarse el 6 de julio, y disputar el sillón presidencial con Nebot.
"El Loco" puede obtener "gran parte de los votos indecisos, que al momento son el 25 por ciento de la totalidad", despegarse de Ehlers y Paz y aún lograr "el primer lugar" en la ronda inicial, advirtió Hugo Barber, director de Perfiles de Opinión.
Nacido en 1952 en Guayaquil, considerada la capital económica de Ecuador, Bucaram comenzó su carrera política como intendente de policía de la provincia del Guayas de 1979 a 1980, y entre 1984 y 1986 fue alcalde de su ciudad natal.
Como los dos candidatos de centroizquierda, Bucaram fundamenta su programa de gobierno en el enfrentamiento a los grupos de poder económico, un mejor reparto de la riqueza, más servicios básicos para las regiones necesitadas y fuentes de trabajo para los desempleados.
Pero, sin duda, la forma de decir y ofrecer sus propuestas lo diferencia claramente de cualquier otro aspirante.
"Bucaram sabe llegar al pueblo. Dice cosas evidentes, simples, pero con fuerza", destacó Jaime Durán, de la firma encuestadora Informe Confidencial.
Mientras, Barber señaló que "Bucaram polariza su discurso, ricos contra pobres, y eso le da mucha fuerza", ya que es el único candidato que desde un principio "supo definir a su contrincante (Nebot) y atacarlo frontalmente".
Bucaram llega de modo eficaz a los electores tanto en actos públicos como a través de la televisión. En su primera campaña, en 1988, "buscó lo espectacular", recordó Durán. "Llegaba en helicóptero, disfrazado de Batman, y a la gente le gustaba su sentido del humor".
El candidato del Partido Roldosista logró pasar en 1988 a la segunda ronda, para caer finalmente derrotado por el socialdemócrata Rodrigo Borja, que gobernó desde ese mismo año hasta 1992.
Ahora, busca el apoyo de los votantes de clase media, por lo que ha mesurado su discurso, "aunque siempre será el mismo", afirmó Durán.
Bucaram se acompaña en sus concentraciones públicas de grupos famosos de música popular, como "Los Iracundos", de Uruguay, quienes han manifestado una profunda amistad con el político roldosista. "No cobramos ni un centavo", aseguró uno de los integrantes del grupo, en una entrevista televisada.
Los partidarios de Bucaram llenan las plazas donde su candidato se presenta, le piden que cante y él les ofrece un bolero, le exigen que imite al derechista Nebot y él saca su teléfono celular y habla en inglés pues, según dice, "es el idioma que Nebot desearía que hablasen los ecuatorianos".
Frente a las críticas a las polémicas y contrastantes imágenes que utiliza en su propaganda por televisión, Bucaram aclara que él mismo prepara "y musicaliza" esos mensajes.
"No sé si es un truco mostrar la miseria, frente a los ricos y sus lujos. Así siento la injusticia y es lo que combato", afirma.
La candidatura de Bucaram, cuya divisa es "La fuerza de los pobres", tiene su mayor implantación en la región costera. "Estoy trabajando ahora para que se me conozca en la sierra y el oriente, y lo conseguiré", aseguró. (FIN/IPS/mg/ff/ip/96).
