Por primera vez en la historia democrática de Ecuador, el 7 de julio disputarán la Presidencia en una segunda ronda electoral dos candidatos nacidos en Guayaquil, la ciudad más poblada de este país andino considerada su capital económica.
El derechista Jaime Nebot, candidato del Partido Social Cristiano (PSC), consiguió este domingo el primer puesto, con 27,3 por ciento de los votos, seguido por Abdalá Bucaram, líder del populista Partido Roldosista Ecuatoriano (PRE), que obtuvo 25,4 por ciento.
Estos datos, obtenidos mediante un conteo rápido realizado por cuatro cadenas de televisión locales, coinciden con los de la conformación del Congreso unicameral ecuatoriano, donde el PSC se consolidó como la primera fuerza política del país.
De las 82 curules que estarán disponibles a partir del 10 de agosto, el PSC obtuvo cuatro diputados nacionales y 23 provinciales, seguido por el PRE, con tres representantes nacionales y 16 provinciales.
La mayor diferencia entre los dos candidatos, según los analistas, radica en la forma en que articulan sus discursos, dirigidos a sectores distintos de la población. En los planes de gobierno presentados se observa gran similitud en las propuestas políticas y económicas.
"Un Estado chico y muy eficaz" es la propuesta modernizadora de Bucaram, un abogado de 44 años que considera "sana la inversión de capitales privados en áreas estratégicas como petróleo y energía", una fórmula por la cual el Estado contará con recursos para garantizar los subsidios en salud y educación.
"Gobernar más y administrar menos", propuso Nebot, de 45 años y también abogado, quien impulsará la "transformación de empresas estatales en sociedades anónimas, garantizando la participación mayoritaria del Estado".
"Ampliar su espectro político ha sido el objetivo de Bucaram y de Nebot", según Hugo Barber, de la empresa encuestadora Informes de Opinión.
En 1992, Nebot pasó a la segunda ronda electoral en su primera postulación, con el actual presidente Sixto Durán Ballén, quien nacido en Boston, Estados Unidos, desde pequeño se radicó en la Quito, en un duelo de regiones en el que se enfrentaron la sierra y la costa.
Al final, la mesura de Durán Ballén, que contaba con el apoyo del Partido Conservador, logró vencer la "enérgica palabra" del candidato socialcristiano.
Bucaram también compitió en una segunda ronda en 1988, frente al quiteño Rodrigo Borja del partido Izquierda Democrática, en otro duelo entre la sierra y la costa.
En esa ocasión, el populismo de Bucaram contó con la resistencia de los votantes de las 11 provincias de la sierra, entre las 21 provincias de Ecuador.
En esta oportunidad, su tercera carrera presidencial, "Bucaram, que continuó con su discurso dirigido hacia los sectores populares, intentó llegar a la clase media y media alta del país", por medio de Rosalía Arteaga, candidata a la Vicepresidencia, señaló Barber.
Con la presencia en la fórmula presidencial de Arteaga, ex ministra de Educación en el gobierno de Durán Ballén, nacida en la ciudad de Cuenca, 442 kilómetros al sur de Quito en el llamado callejón interandino, intentará disminuir la resistencia de Bucaram en la sierra.
Según la consultora Informe Confidencial, la resistencia que tiene Bucaram en la sierra es del 50 por ciento de los votantes, frente al 23 por ciento de Nebot.
El compañero de fórmula de Nebot, el quiteño Diego Cordovez, ex canciller en el gobierno de Borja (1988-92), cuenta con gran aceptación en la capital, dijo Barber.
En esta carrera presidencial entre dos representantes de la costa, los añalistas estiman que los candidatos a la Vicepresidencia podrían definir al triunfador el 7 de julio. (FIN/IPS/mg/ag/ip/96)