La guerrilla zapatista de México se declaró en "alerta máxima" por la instalación de nuevos campamentos militares en zonas de selva y pidió a las comisiones mediadoras que actúen de inmediato para evitar choques armados.
Un vocero de la guerrilla identificado como "capitán Noe" dijo el domingo pasado que, con el argumento del combate al narcotráfico, los militares ocuparon puntos estratégicos cercanos a los campamentos del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), desde donde pueden atacar con facilidad.
Las comisiones Nacional de Intermediación y de Concordia y Pacificación, que median en los diálogos de paz que desde abril de 1995 mantienen el EZLN y el gobierno, deben ver "la forma de detener los movimientos militares", pues de lo contrario podrían ocurrir enfrentamientos "que no deseamos", dijo Noe.
Portavoces del Ejército indicaron que ingresaron a la zona poque se reportó la presencia de plantíos de marihuana en las "comunidades zapatistas".
"En cualquier momento puede haber un enfrentamiento entre los dos ejércitos", pues el EZLN, que no tiene ningún vínculo con el narcotráfico, va a defender sus posiciones a cualquier costo, advirtió Noe.
Hace una semana la guerrilla zapatista se declaró en "alerta roja" y suspendió su participación en las negociaciones con el gobierno, debido a las sentencias por terrorismo dictadas contra dos supuestos miembros del EZLN, detenidos en febrero de 1995.
Los presuntos guerrilleros Javier Elorriaga y Sebastian Entzin fueron condenados a 13 y seis años de prisión. Los acusados no pudieron beneficiarse con la ley que amnistió a los líderes del EZLN para facilitar el diálogo, pues fueron detenidos antes de su promulgación.
En un comunicado dirigido a los mediadores, el máximo líder visible del EZLN, el subcomandante Marcos, afirmó que representantes oficiales le pidieron una entrevista "secreta, lo que dibuja muy bien la intención gubernamental de romper el diálogo y reanudar la guerra".
Según Marcos, el gobierno se prepara para realizar un "asalto relampagueante" contra el EZLN.
Las sentencias contra los presuntos guerrilleros representan una sentencia contra el EZLN. "Fuimos acusados, juzgados y sentenciados como terroristas" y así no puede seguir el diálogo, expresó Marcos.
La guerrilla condicionó su participación en los diálogos con el gobierno a que se halle una salida a los casos de Elorriaga y Entzin, mientras el gobierno recordó al EZLN que la aministía que favorece a sus dirigentes sólo está operativa mientras la negociación se mantenga.
Los últimos días las comisiones de mediación se han reunido varias veces con representantes oficiales y han enviado mensajes al EZLN con el objetivo de buscar una salida al difícil momento que vive el proceso de paz en el sureño estado de Chiapas. (FIN/IPS/dc/jc/ip/96)