Casi todos los sectores políticos de Chile recibieron hoy con satisfacción el fallo de la Corte Suprema de Justicia, que condenó al ex ministro Francisco Javier Cuadra por sus acusaciones no fundamentadas sobre consumo de drogas entre parlamentarios.
El máximo tribunal sentenció al ex ministro de la dictadura del general Augusto Pinochet (1973-90) a 540 días de presidio remitido, ratificando el anterior fallo de un juez y anulando la absolución dictada en favor de Cuadra en enero por la Corte de Apelaciones.
El presidio remitido consiste en que el sentenciado no es enviado a la cárcel ni tampoco cumple arresto domiciliario, sino que debe presentarse regularmente a firmar ante el juez mientras dure la condena. Asimismo, necesitará un permiso especial de la justicia para viajar al exterior.
La resolución de la Corte Suprema, que consideró a Cuadra culpable del delito de injurias y calumnias, resguarda la honra de las instituciones democráticas ante acusaciones sin fundamento, señalaron parlamentarios oficialistas y opositores.
El conflicto se desató en enero de 1995, cuando el ex ministro y ex embajador ante el Vaticano afirmó en declaraciones al semanario Qué Pasa que "existen parlamentarios consumidores de drogas".
Las aseveraciones de Cuadra motivaron una sesión especial de la Cámara de Diputados, televisada en directo, en la cual se acusó al ex funcionario dictatorial de promover una campaña orientada a desprestigiar al parlamento.
Uno de los más duros críticos de Cuadra fue el diputado Andrés Allamand, presidente del derechista Partido Renovación Nacional (PRN), quien denunció la probable colaboración con el denunciante de ex informantes de la policía secreta de la dictadura.
El ex ministro se afilió al PRN tras el restablecimiento de la democracia en marzo de 1990, pero renunció a ese partido tras sus declaraciones.
El socialista Jaime Estévez, presidente de la Cámara de Diputados, destacó en su oportunidad la coincidencia de los ataques al parlamento con la fase final del juicio por el asesinato en 1976 del ex canciller Orlando Letelier.
El fallo de este proceso a fines de mayo condenó a siete y seis años de presidio respectivamente al ex jefe de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), general Manuel Contreras, y su segundo en ese cuerpo represivo, el brigadier Pedro Espinoza.
El propósito de Cuadra habría sido desatar una escalada de sospechas sobre el parlamento y eventualmente el Poder Judicial en una segunda instancia, vinculando estas instituciones al fenómeno de la corrupción y el narcotráfico.
El ex ministro fue emplazado a revelar los nombres de los supuestos congresistas consumidores de drogas y se negó a hacerlo, ante lo cual el Senado y la Cámara de Diputados iniciaron acciones legales en su contra.
El único partido que prestó algún respaldo a Cuadra fue la opositora Unión Demócrata Independiente (UDI), de derecha, que propuso que los 120 diputados y 45 senadores se sometieran a exámenes para demostrar que no consumían drogas.
El magistrado Ismael Huerta, designado juez especial en el caso, emitió el 18 de diciembre el fallo que condenó al ex ministro y ex embajador a 540 días de presidio remitido y a una multa equivalente a unos 220 dólares.
Cuadra apeló de esa sentencia, reivindicando la libertad de expresión, y el 18 de enero la Corte de Apelaciones lo absolvió bajo el argumento de que en el momento de sus declaraciones a Qué Pasa el consumo de drogas no estaba aún tipificado como delito en Chile.
Las cámaras legislativas recurrieron entonces a la Corte Suprema, que este martes puso punto final al proceso al ratificar el fallo de primera instancia del juez Huerta.
Cuadra, quien trabaja actualmente como analista político y comentarista radial, estimó que la sentencia del máximo tribunal sienta "un delicado precedente para la libertad de expresión" y afirmó que la historia le dará la razón.
Al respecto, comentó la situación de Colombia y las acusaciones que enfrenta el presidente ese país, Ernesto Samper, sobre financiamiento del narcotráfico en su campaña electoral.
Estévez señaló que la sentencia "deja definitiva y claramente establecido que él (Cuadra) faltó a la verdad al hacer imputaciones sin fundamento a los parlamentarios".
"Es muy positivo que en Chile no prevalezca la impunidad para injuriar a las instituciones y a las personas", señaló a su vez el diputado Allamand.
El diputado Camilo Escalona, presidente del Partido Socialista, valoró que la condena de Cuadra tenga lugar "cuando se ha hecho habitual el desprestigio del sistema político, probablemente con fines de desestabilización y de crear condiciones para una involución hacia el pasado dictatorial".
En este contexto "es muy importante que la Corte Suprema haya establecido un criterio que pone atajo a prácticas extraordinariamente perniciosas", señaló Escalona.
La sentencia del máximo tribunal fue comentada también favorablemente por diputados y senadores de los partidos Demócrata Cristiano y Por la Democracia, miembros junto a los socialistas de la coalición gobernante. (FIN/IPS/ggr/ag/ip/96)