Para morir sólo hay que estar vivo, reza un viejo proverbio. Además de estar vivo, en Cuba basta con montar bicicleta, tener auto o andar a pie por las calles.
Aunque en 1995 las estadísticas muestran un decrecimiento con relación al año precedente, en ese período ocurrieron 8.510 accidentes de tránsito que provocaron 1.588 muertes y 8.978 lesionados.
"Veníamos despacio porque los niños estaban durmiendo, de momento vimos como el auto que iba delante atravesó la vía con la luz roja y se estrelló contra un camión", cuenta Jorge Ramírez, quien brindó su auto para transportar a los heridos a un hospital habanero.
Durante 1994 el total de hechos de esta naturaleza alcanzó 7.994, con 1.561 víctimas fatales y 8.176 heridos, según las estadísticas de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR).
"Este fenómeno resulta contradictorio con el nivel de atención e índices de salud alcanzados por el país", indican fuentes especializadas.
Estadísticas del Ministerio de Salud Pública sitúan los accidentes como la primera causa de muerte en el grupo etáreo de uno a 49 años, mientras que la mitad de los fallecidos muere en accidentes de tránsito.
Como promedio diario en 1995 en la isla se registraron 23,3 accidentes que dejaron como resultado 4,3 fallecidos y 24,5 lesionados.
"El que manejaba murió al instante, los acompañantes recibieron lesiones graves y fueron remitidos a terapia intensiva", dice Rámirez.
Entre las principales causas de los accidentes están el exceso de velocidad, no atender el control y dirección del vehículo, no respetar el derecho de vía, adelantamiento indebido, violaciones de luces de semáforos, infracciones de los ciclistas e ingestión de bebidas alcohólicas.
La introducción masiva de las bicicletas para aliviar la situación del transporte en medio de la crisis económica por la que atraviesa la isla es considerada por algunos como la gota que colmó la copa de los accidentes.
De los 8.516 casos, 3.073, un tercio del total, están asociados a los ciclos para un promedio diario de 8,4, indican las fuentes policiales.
"Los ciclistas olvidan que ellos son la carrocería y transitan por las vías en sentido contrario al tráfico, en muchos casos sus infracciones los llevan a la muerte", considera un conductor con más de 40 años de experiencia.
Los accidentes de ciclos en 1995 ocasionaron 479 muertes, 1,3 cada día y los lesionados sumaron 2.920, lo que equivale a ocho cada 24 horas, señalan los expertos.
La capital cubana, con una población de 2.175 000 habitantes, fue testigo de 1.971 sucesos de este tipo durante el pasado año. Dos ciclistas murieron cada tres días como resultado de las colisiones.
Las lesiones originadas son mayoritariamente fracturas de cráneo y miembros inferiores, mientras que la mayor cantidad de víctimas son del sexo masculino, fundamentalmente jóvenes, con edades entre 15 y 35 años, reveló la investigación.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define los accidentes como "hechos súbitos que ocasionan daños a la salud y se producen como consecuencia de condiciones potencialmente prevenibles".
Algunos estudios señalan que entre 80 y 95 por ciento de los accidentes de tránsito son atribuibles a las personas y uno de los factores que los explican es la ingesta de bebidas alcohólicas.
Una investigación realizada por el Instituto de Medicina Legal durante el decenio 1983-1993 reveló que uno de cada tres fallecidos en 3.200 accidentes con víctimas fatales habían ingerido bebidas alcohólicas y que más de 75 por ciento de ellos estaban en estado de embriaguez.
"La gente le toma confianza al timón y se va creyendo infalible. A partir de ahí se tornan peligrosos porque piensan que quienes chocan son los demás", dice Alejandro, un chofer de 26 años que hasta ahora no ha tenido accidentes.
De acuerdo con los expertos, la mayor peligrosidad está en las carreteras, donde se producen los accidentes de mayor magnitud y con resultados más dramáticos.
En la mayor parte de los casos las causas radican en el exceso de pasajeros en un vehículo no habilitado para el transporte de personas, como camiones de carga general o mal adaptados, aunque también influye el estado técnico de los equipos.
En un accidente ocurrido en diciembre pasado en la oriental provincia de Granma, a más de 800 kilómetros de La Habana, fallecieron 16 personas, entre ellos tres menores, y 65 resultaron lesionados.
Según la OMS, los accidentes de tránsito han hecho más estragos en la vida y la salud de las personas que todas las catástrofes juntas.
Anualmente en países desarrollados se registran unas 200.000 defunciones por esta causa, mientras que los países en desarrollo concentran unos 500.000, una quinta parte de los cuales corresponden a menores de 15 años. (FIN/IPS/rs/dg/pr-tr/96)