Realizadores radiofónicos de América Latina se reunirán la próxima semana en México en la primera bienal regional de la radio para hablar sobre su trabajo, intercambiar experiencias y participar en concursos.
El objetivo central de la cita es relacionar a los productores, "pero además dar a conocer lo que están haciendo y sobre todo contribuir a alentar la producción que está pasando por un momento difícil", dijo a IPS Gabriel Sosa, portavoz de los organizadores.
A 101 años de la primera emisión radial en el mundo, es la pirmera vez que los realizadores de América Latina se reunirán en un foro tan amplio.
Además de conferencias y talleres sobre escritura de guión, en la bienal se presentarán trabajos para concursos en los géneros de reportaje, drama, programas infantiles y radio comunitaria e indígena.
Al encuentro, patrocinado por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes de México y por dos estaciones de radio locales, fueron invitadas empresas comerciales, universidades e incluso "radios piratas", indicó Sosa.
Según un informe del Centro Internacional de Estudios Superiores de Comunicación para América Latina (Ciespal), con sede en Quito, en la región existen 5.876 emisoras de radio, de las cuales 35,1 por ciento en Brasil y México, 30,9 por ciento en los países andinos, 17,4 por ciento en América Central.
"Una visión de la radio en América Latina nos permite afirmar que es el medio más difundido en la región. En la década del 60, contaba con unos 14 millones de receptores de radio, hoy se calcula esa cifra en 100 millones", indica Ciespal.
La radio tiene una gran penetración, llega a muchos más lugares que la televisión y su potencial creativo es enorme. Periodístas, artistas, dramaturgos deben ser apoyados lo mismo que las instituciones que trabajan en el medio, expresó Sosa.
Ciespal afirma que 77 por ciento de las radioemisoras que operan en América Latina son de carácter comercial, mientras que sólo seis por ciento se autodefinen como educativas o culturales.
Hay una concentración excesiva de radioemisoras en los grandes centros urbanos, lo que provoca "sobresaturación de frecuencias, derroche de esfuerzos y recursos, competencia extrema, incomunicación y, por supuesto, marginación de los sectores periféricos".
Sosa opina que la primera bienal de radio es una excelente oportunidad para que los realizadores no comerciales dialoguen sobre sus proyectos y concerten esfuerzos para llegar a un número mayor de personas.
José López, coordinador para América Latina y el Caribe de la Asociación Mundial de Radios Comunitarias (AMARC), sostuvo que la mejor contribución que puede hacer la cita a la democracia es fortalecer en cantidad y calidad a las radios comunitarias.
"Los medios comunitarios no conspiran, al contrario fortalecen la democracia porque aseguran la diversidad cultural, la libertad en el ejercicio periodístico y el acceso no sólo a la palabra sino a la propiedad de los medios de los distintos sectores de la sociedad civil", declaró.
Los organizadores indicaron que el antecedente de la cita, que se realizará entre el lunes y el viernes próximos, es el Encuentro de Radios Culturales, celebrado en 1994 en Alemania, donde los participantes concluyeron que era imprescindible incentivar la producción en América Latina.
En América Latina hay casos muy particulares de estaciones dedicadas a difundir los valores de la minorías étnicas y de las organizaciones comunitarias y sindicales, un aspecto en el que la región se diferencia en el mundo, destacó Ciespal. (FIN/IPS/dc/96)
