El desarrollo de la industria turística de Rumania se ve trabado por una infraestructura inadecuada, en particular en los alojamientos, pese al rápido crecimiento del número de visitantes en los últimos tiempos.
Las últimas estadísticas publicadas por el Ministerio de Turismo indican que los ingresos turísticos de Rumania en la primera mitad de 1995 fueron de 86 millones de dólares, lo que significa un aumento de 9,4 por ciento en comparación con igual período del año anterior.
Fueron cino millones los extranjeros que viajaron al país de Drácula en 1995, que por otra parte ofrece uno de los conjuntos más atractivos de interés turístico y cultural de Europa.
No sólo tiene el cinturón del río Danubio, sino también la costa del mar Negro y una serie única de monasterios. Los hermosos paisajes de los montes Cárpatos ofrecen lugares idílicos de relajación y descanso.
Los círculos vinculados al turismo entienden que el país tiene capacidad para crecer por encima de los cinco millones de visitantes que ahora recibe, pero a condición de que se mejoren las instalaciones y se aumenten los alojamientos ofrecidos.
Con 0,7 camas por cada 100 habitantes, la capacidad locativa de Rumania es 200 veces más baja que la de Austria, por ejemplo, que es el líder de Europa en este aspecto.
Esa realidad refleja en parte la actitud ambigua con que fue tratada la industria turística en la época comunista. El régimen de Nicolae Ceausescu tenía dudas acerca de sus beneficios.
El descuido de aquellos años presenta ahora un impedimento al desarrollo de esta actividad, en plena implantación de la economía de mercado, cuando se supone que el turismo juegue un papel central en el crecimiento económico.
Los expertos culpan a las trabas estructurales y burocráticas las limitaciones que encuentra el desarrollo turístico, por debajo de las potencialidades del país, pese a que el primer semestre del año pasado haya registrado un buen crecimiento.
"Las bellezas naturales de Rumania se ven ensombrecidas por sus deficientes bases materiales, que no han recibido importantes inversiones en los últimos cinco años", comentó un representante de la Federación de Uniones de Turismo.
"Nuestra capacidad turística es de un volumen inadecuado y de un nivel medio de comodidades", precisó.
Los funcionarios del Ministerio hicieron notar que un millón de turistas, entre los cinco millones que visitaron Rumania en 1995, vinieron de Moldova, país vecino con el que esta nación tiene estrechos lazos culturales y lingüísticos. (FIN/IPS-CEE/tra-en/gv/fn/arl/if/96)