El gobierno de Brasil formalizó este lunes la reducción de su lista de excepciones al arancel externo común del Mercado Común del Sur (Mercosur), de 300 a 285 rubros, y una rebaja gradual de los aranceles sobre 122 productos.
La medida de mayor impacto, en la nueva lista publicada este lunes en el Diario Oficial de la Unión, afecta a los productos electroelectrónicos, que tuvieron su arancel reducido de 62 a 35 por ciento.
Los calzados quedan con mayor proteccion, 40 por ciento, en tanto otros productos pasan a pagar 30 por ciento de impuesto de importacion.
Esos productos, entre los cuales también se incluyen bicicletas y motociclos, pasarían a pagar el arancel externo común, o un máximo de 20 por ciento, a partir del 1 de abril, según lo acordado inicialmente con los demás socios del Mercosur.
Pero el gobierno brasileño teme un nuevo rebrote de importaciones, tal como ocurrio en fines de 1994 y comienzos de 1995, teniendo en cuenta que los electrodomésticos importados ya registraron fuerte crecimiento en enero.
Por este motivo optó por una reducción gradual, llegando al arancel externo común en el año 2001.
Con esa decisión, la lista brasileña de excepciones sólo perdió 15 rubros, entre los que se cuentan resinas termoplásticas y aparatos de refrigeración del aire, sobre los que se pasa a cobrar el arancel común de 14 por ciento en las importaciones desde fuera del Mercosur.
La situación, tal como la evalúa el gobierno, se invirtió en relación al comienzo del año pasado. La preocupación anterior era el riesgo de desabastecimiento y la consecuente alza de precios, ante el fuerte aumento de la demanda provocado por la estabilización de la moneda desde julio de 1994.
Por eso el gobierno negoció con el Mercosur una lista adicional de excepciones de emergencia, de 150 productos, la mayoría con aranceles reducidos o eliminados, que hoy está reducida a 63 productos. La medida, con vigencia de un año y revisiones trimestrales, debe finalizar el 28 de abril.
Pero en ese momento ya preocupaba a las autoridades el gran déficit comercial, que se acumulaba desde noviembre de 1994. Se adoptaron medidas de contención del consumo interno -reducción del dinero en manos del público y fuerte aumento de intereses- y se elevó fuertemente el arancel de automóviles y otros rubros.
Pero sigue el temor a un nuevo desequilibrio en la balanza comercial, pese a los resultados parejos en importación y exportación experimentados en los últimos meses. Por eso se decidió rebajar gradualmente el arancel de 122 excepciones.
Además, el gobierno estudia prolongar una mayor protección en algunos de los 63 productos de la lista adicional, negociando con el Mercosur una prórroga más allá del 28 de abril o incorporándolos a la lista normal que fija la convergencia al arancel externo común sólo en el ano 2001.
Productos textiles, que registraron un aumento de 72,3 por ciento en sus importaciones el año pasado, son los que mas preocupan, incluso porque el sector ejerce fuerte presión por algún tipo de protección, ante la invasión de los asiáticos. (FIN/IPS/mo/ag/if/96)