La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) ha inaugurado un proyecto piloto para reducir las grandes pérdidas posteriores a las cosechas, características de la agricultura de Haití.
Estas pérdidas agravan las carencias alimentarias del país, que de todas formas tiene un déficit anual de producción de alimentos equivalente a la mitad de sus necesidades reales.
"Las estadísticas revelan que esas pérdidas ocurren durante las operaciones de almacenaje, procesamiento y transporte de los productos agrícolas, y suponen entre cinco y 40 por ciento de la producción, según los casos", informó a IPS el agrónomo Volny Paultre, encargado de organizar proyectos de agricultura.
La seriedad de la situación ha hecho que la FAO incluya a Haití en la lista de 44 países de bajos ingresos con gran escasez de alimentación básica. Esos países se benefician del programa especial de producción de alimentos de la organización mundial.
Este programa consiste, en primer lugar, en una fase piloto que es seguida de una fase de extensión realizada por el gobierno del país con asistencia técnica de la FAO.
En el caso de Haití, el proyecto incluye el estudio de todas las condiciones requeridas para obtener explotaciones viables. Esto también permitirá que los agrónomos evalúen la potencialidad productiva de la tierra arable del país.
Actualmente, la fase piloto se efectúa en Dubreuil y en Laverdure, dos zonas de tierra irrigada que están ubicadas, respectivamente, en el sur y en el centro de la región de Artibonite.
La fase piloto se aplica en tierras que ya cuentan con irrigación y con una fuerza de trabajo estable. Después de una experimentación exitosa en dos años sucesivos, el proyecto será extendido a otras zonas.
"Se trata de un enfoque que se parece mucho a la vieja "Revolución Verde" que conocimos en los años 70 a escala mundial. En los últimos años la FAO ha hecho varios estudios para comprender lo que realmente pasó en aquellos años", recordó Paultre.
El programa de la FAO dará prioridad a los cultivos de alimentos esenciales en zonas con alta potencialidad agrícola, y utilizará los métodos de demostración como base sobre la cual se apoyará el trabajo de las etapas subsiguientes.
El proyecto pondrá énfasis en la administración de los recursos hídricos, la explotación del potencial de irrigación, la conservación de los recursos naturales y la preservación de la equidad social.
El plan para Haití formará parte de una estrategia regional de garantía alimentaria que será presentada en la cumbre mundial de alimentación a realizarse en Roma en noviembre de este año. (FIN/IPS/tra-en/ha/tt/arl/dv/96)