El grupo de América Latina y el Caribe en la Comisión sobre Recursos Genéticos Vegetales de la FAO, que sesiona esta semana en esta capital, reclamó el derecho de los países en desarrollo a una participación igualitaria en los beneficios de la biodiversidad.
Colombia, en representación del grupo, subrayó la necesidad de que los países industrializados compartan las ganancias resultantes del uso de la diversidad biológica de los países pobres.
Los países ricos han declarado la propiedad intelectual de recursos biológicos originados en naciones en desarrollo, y obtenido grandes beneficios con ellos, recordó la delegación colombiana a la Segunda Sesión Extraordinaria de la comisión especial de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
Parte de esos beneficios "deben ir a las comunidades y países en desarrollo, porque el material original provino de ellos", dijo el vocero colombiano.
Delegaciones de más de 100 países comenzaron esta semana una revisión de dos propuestas de documentos que describen el estado de la diversidad vegetal del planeta y recomiendan acciones a los gobiernos y organizaciones internacionales y no gubernamentales para conservar y utilizar la decreciente riqueza biológica de la Tierra.
Los recursos genéticos vegetales son un elemento clave para la seguridad alimentaria del planeta, dijo el vicedirector general de la FAO, Howard Hjort, en las declaraciones de apertura de la sesión.
Jacques Diouf, director general de la FAO, dijo recientemente que aunque en el planeta hay alimentos para todos, la distribución es terriblemente desigual dentro y entre países y de una región a otra.
En los países en desarrollo, casi 800 millones de personas sufren desnutrición severa y casi 200 millones de niños menores de cinco anos están afectados por severa deficiencia de proteínas y calorías.
Los documentos discutidos en Roma serán presentados para ser adoptados por los gobiernos en la Cuarta Conferencia Técnica Internacional, a celebrarse en junio en Leipzig, Alemania.
Países en desarrollo y organizaciones no gubernamentales esperan que uno de los informes, el Plan de Acción Global para la Conservación y Utilización Sostenible de Recursos para la Alimentación y la Agricultura, que actualmente no es vinculante, se pueda convertir en protocolo de la Convención sobre Diversidad Biológica.
La revisión del Plan de Acción Global se realiza en momentos en que la misma comisión de la FAO estudia otro instrumento no vinculante, el Procedimiento Internacional de Recursos Genéticos Vegetales.
Analistas en Roma señalaron que ambos documentos fueron logros de los países en desarrollo que impusieron el reconocimiento de varios temas de su interés.
Se estima que el Plan de Acción será resistido por países ricos. Varios gobiernos ya han expresado sus reservas sobre "nuevos y adicionales recursos" para ejecutar el Plan.
La moderna producción de plantas mediante bancos de genes ha dado muy buenos resultados para elevar el rendimiento de las cosechas.
No obstante, destacó el Plan de Acción, la gran mayoría de los agricultores del mundo, por elección o necesidad, participan en la conservación y el desarrollo de recursos genéticos cuando seleccionan y guardan las semillas para la próxima estación.
Estos agricultores viven en ambientes agrícolas "marginales"' y practican una agricultura básica, pero a menudo carecen de materiales genéticos diversos que podrían integrarse a las cosechas existentes para mejorar la producción. (FIN/IPS/tra-en/ao/rj/lp/dv-en/96)