Una nueva crisis se desató hoy en la oposición derechista en Chile, con la renuncia a la Unión de Centro-Centro Progresista (UCCP) de su presidenta, Angela Vivanco, y otros tres miembros de la mesa directiva.
El quiebre del partido creado por el senador y millonario empresario Francisco Javier Errázuriz, se suma a la abierta pugna entre los dos principales partidos de la derecha chilena: Renovación Nacional (PRN) y Unión Demócrata Independiente (UDI).
Vivanco, los vicepresidentes Enrique Schilling y Sergio Contreras, y el prosecretario Jorge Santelices, decidieron abandonar la UCCP luego de que Errázuriz impuso una línea de alianza privilegiada con la UDI que busca aislar al PRN.
Los cuatro dirigentes renunciados dijeron que en la colectividad no hay democracia interna para debatir diversas posiciones y acusaron a Errázuriz y sus seguidores de "querer dividir a la centroderecha".
Según trascendió, en una reciente reunión de la comisión política de la UCCP triunfó la línea de Vivanco, pero la resolución fue desconocida en los hechos por el equipo negociador del partido, que concretó un pacto con la UDI.
Los negociadores, entre los cuales no estaba la presidenta, siguieron las orientaciones de Errázuriz, un histriónico empresario a quien sus adversarios políticos critican por su personalismo y autoritarismo.
El origen de la crisis está en el acuerdo que la directiva del PRN, encabezada por el diputado Andrés Allamand, y el gobierno del presidente Eduardo Frei negociaron en octubre de 1995 para el apoyo de ese partido a un conjunto de reformas constitucionales.
El sector "duro" del PRN, que se identifica con la dictadura del general Augusto Pinochet (1973-90), coincidó con la UDI en un rechazo a las reformas, al cual se sumó también Errázuriz, único senador de la UCCP.
Las enmiendas constitucionales fueron rechazadas el jueves en el Senado, cuando los "duros" del PRN, la UDI, la UCCP y los ocho senadores designados impidieron que alcanzaran las mayorías de dos tercios y tres quintos necesarias para su aprobación.
El enfrentamiento de Allamand con los "pinochetistas" de su partido y de la UDI provocó un quiebre del pacto Unión Por Chile, acuerdo electoral integrado además por la UCCP y el pequeño Partido del Sur, que no tiene representación parlamentaria.
En vísperas de la votación en el Senado, y de cara a los comicios municipales del próximo 28 de octubre, la UDI condicionó la continuidad del pacto con el PRN al rechazo a las reformas constitucionales, posición suscrita también por Errázuriz.
Vivanco y sus seguidores objetaron el aislamiento del PRN y abogaron por la recomposición de una alianza derechista amplia que incluya también al Partido del Sur.
Desde el Senado en Valparaíso, 120 kilómetros al oeste de Santiago, Errázuriz sostuvo que la "razón de fondo" de la renuncia de Vivanco y Schilling, ambos abogados, está en que la UCCP les prohibió asumir la defensa de un procesado por un millonario fraude a la estatal Corporación del Cobre (Codelco).
La aseveración del senador fue parcialmente desmentida por Cristián Espejo, jefe de la defensa de Juan Pablo Dávila, quien precisó que Schilling es el único ex dirigente de la UCCP contratado por el ex jefe de operaciones a futuro de Codelco.
Trascendió igualmente que Vivanco fue despedida la semana pasada de su cargo de fiscal (auditora judicial) de Planvital, una administradora de fondos de pensiones que tiene a Errázuriz como uno de sus mayores accionistas. (FIN/IPS/ggr/ag/ip/96)