El gobierno de Chile admitió hoy que los incrementos en la cotización internacional del petróleo están dificultando su meta de rebajar a 6,5 por ciento la inflación en este año, tras la tasa de 8,2 por ciento registrada en 1995.
El objetivo oficial se torna "más exigente" luego de que los incrementos del petróleo originaran, el domingo último, la tercera alza en lo que va del año en los precios internos de los combustibles, dijo el ministro de Economía, Alvaro García.
Operadores del mercado financiero elevaron el lunes sus previsiones de inflación para este mes de 0,8 a uno por ciento, y advirtieron que los combustibles podrían seguir gravitando con fuerza en el índice de precios al consumidor (IPC) de mayo.
La Empresa Nacional del Petróleo (ENAP), que ya ha dispuesto en este año tres aumentos de precios en las gasolinas, advirtió también que las perspectivas del mercado del crudo para mayo podrían derivar en nuevas alzas de los combustibles.
El último incremento, en vigencia desde el domingo, llevó a casi 60 centavos de dólar el precio al público del litro de gasolina de 93 octanos y significó también aumentos para el combustible diesel y el kerosén.
Productores de alimentos y otros bienes de consumo, así como comerciantes, sostuvieron que los aumentos de la gasolina y el combustible diesel elevaron sus costos de transporte, lo cual los obligará a su vez a revisar sus precios.
Los dueños de taxis anticiparon que pedirán al Ministerio de Transportes que autorice incrementos en sus tarifas para absorber el alza de la gasolina, del orden de cinco centavos de dólar por litro en el curso del año.
Un incremento del IPC de uno por ciento en abril elevaría la inflación de los primeros cuatro meses del año a 2,5 por ciento, superior a la tasa de 2,3 por ciento acumulada en el mismo período de 1995.
El ministro García sostuvo como "no relevante" la incidencia directa en el IPC de las alzas de los combustibles del 23 de marzo y el 13 de este mes, estimándola en 0,2 puntos.
El gerente comercial de ENAP, Pablo Verschae, señaló el lunes que el último aumento en el precio de la gasolina debió ser de 20 a 25 pesos por litro, y fue de sólo seis pesos, gracias al aporte del Fondo de Estabilización de Precios del Petróleo.
Este fondo, creado por el gobierno chileno en 1991 a raíz de la llamada Guerra del Golfo, asciende a 190 millones de dólares, y ahora se aplicó por primera vez para la gasolina, con subsidio a importadores y refinerías locales.
Chile es el país sudamericano más dependiente del mercado mundial del crudo, ya que su producción interna de petróleo, en constante declinación, cubre sólo seis por ciento de la demanda.
En 1995 el país produjo 3,8 millones de barriles, 15 por ciento menos que en 1994, en tanto las importaciones crecieron 13 por ciento, para totalizar 54,6 millones de barriles, a un precio promedio de 16,59 dólares por barril.
Durante marzo de este año el precio del petróleo Brent alcanzó un promedio de 19,56 dólares y en el transcurso de abril ha fluctuado entre 20 y 22,5 dólares por barril, lo cual influye en altas cotizaciones en el mercado a futuro para el mes de mayo.
Las autoridades esperan para junio una baja de los precios del petróleo, aunque el ministro de Minería, Benjamín Teplizky, advirtió que la situación de baja oferta puede persistir mientras se mantenga el embargo de Naciones Unidas contra Iraq.
Si la producción iraquí, que cubre uno por ciento del consumo mundial, regresa al mercado, se corregiría el desequilibrio de oferta y se podría prever una baja en los precios del petróleo de hasta 20 por ciento, según Verschae. (FIN/IPS/ggr/ag/if/96)
