Los presos amotinados del centro de detención brasileño de Aparecida de Goiania, a 230 kilómetros de Brasilia, iniciaron la fuga poco después de las 21 GMT de hoy, en ocho automoviles y con seis rehenes, 151 horas después de haber iniciada la rebelión.
Se desconoce el número exacto de presos fugados, pero las autoridades policiales lo estiman en cerca de 40.
Si se cumple el acuerdo establecido con la comisión negociadora del gobierno estadual de Goías, este miércoles, la "cacería" de los fugados empezará en la madrugada, diez horas después de iniciado el escape.
Una operación conjunta de policías de varios estados y del gobierno federal, incluyendo los agentes encargados de controlar las carreteras, intentará monitorear las vías de fuga y bloquearlas tras la "tregua".
Ello dependerá también de que los presos que escpararon del penal cumplan su promesa de liberar a los seis últimos rehenes que mantienen en su poder dentro del plazo de diez horas.
Probablemente, los amotinados prolongaron las negociaciones para iniciar la fuga en el momento que consideraron más adecuado.
Con el feriado de Semana Santa, que comenzará este jueves para parte de la población, como los funcionarios públicos y bancarios, desde la tarde de este miércoles aumentó mucho el flujo de vehículos en las carreteras, facilitando los propósitos de los fugados. (FIN/IPS/mo/dg/ip/96)