El presidente del Banco Central de Brasil, Gustavo Loyola, tendría dificultades para mantenerse en el cargo, por haber autorizado un aumento salarial de 77,7 por ciento a sus funcionarios.
El presidente Fernando Henrique Cardoso vetó el aumento, ante las reacciones indignadas de parlamentarios, de otros funcionarios públicos e incluso de una parte del Banco Central, no beneficiada por la medida.
El aumetno salarial, defendido por Loyola como forma de estimular un mejor cumplimiento de las tareas del Banco Central, es extremadamente inoportuna. El gobierno dejó de corregir los salarios de todos sus funcionarios, como hacía siempre en enero, con la justicación de la necesidad de reducir el déficit público.
El Congreso tramita una propuesta de enmienda constitucional, con el objetivo de promover una reforma administrativa que reduzca los gastos salariales del Estado, lo que comprende poner fin a la estabilidad y despedir a miles de funcionarios.
Además, las autoridades económicas tratan de limitar a un máximo de 10 por ciento el aumento del salario mínimo que deberá hacerse efectivo el 1 de mayo, buscando evitar mayor déficit en sus propias cuentas y en el sistema de seguridad social.
El salario mínimo está fijado en 100 reales (101 dólares), mientras los funcionarios del Banco Central empiezan su carrera ganando 11 veces más, comparación que amplió las protestas.
Por fin, el Banco Central se hizo blanco de ataques de todos los sectores, por haber fallado en la fiscalización de los bancos comerciales, permitiendo los escándalos financieros ocurridos desde el año pasado, incluyendo la quiebra del Banco Nacional, que por 10 años estuvo alterando su contabilidad.
Loyola es el decimotercer presidente del Banco Central en los últimos 11 años, un hecho que indica la inestabilidad de las autoridades monetarias en Brasil.
Ya debilitado por los sucesivos escándalos bancarios, ver anulada una decisión y una promesa a sus funcionarios puede llevarlo a la renuncia, poco más de 10 meses después de haber asumido el cargo, señaló este sábado el diario O Globo. (FIN/IPS/mo/ag/ip-if/96)