La primera bolsa de valores regional de Africa, cuya principal finalidad será promover la integración económica y la inversión internacional, está a punto de empezar a funcionar en el área francófona tras un año de preparación.
"Nuestra propia experiencia servirá como esqueleto de apoyo para la estructura regional que se construirá a su alrededor", anunció la semana pasada Leone Naka, presidente de la Bolsa de Valores de Adidjan (BVA), en el 20 aniversario de la institución.
Abidjan, capital de Costa de Marfil, es el único mercado de valores de los 14 estados francófonos de Africa, una realidad que le ha permitido convertirse también, a partir del mes próximo, en sede de una bolsa regional que cubrirá a siete de estos países.
El futuro mercado común de valores es una creación de Benín, Burkina Faso, Costa de Marfil, Malí, Níger, Senegal y Togo, bajo los auspicios de la Unión Económica y Monetaria de Africa Occidental (UEMOA).
Ya unidos por una moneda común -el franco CFA, que ha estado ligado al franco francés desde la década de 1940-, estos países creen que la unión bursátil facilitará el comercio regional y la inversión.
Además de la oficina central en Abidjan, la bolsa regional tendrá oficinas en cada país. Las acciones se cotizarán de forma simultánea en todos los mercados.
Con el apoyo bancario del banco regional francófono, el BCEAO, y del Banco Mundial, la iniciativa de la UEMOA se propone abrir el mercado accionario a los 60 millones de personas que forman la población de los estados miembros del futuro sistema.
Los expertos financieros entienden que el proyecto beneficiará la imagen de Africa como un mercado emergente serio. Además, la BVA podrá desempeñar a través de la bolsa regional un importante papel en la movilización de capitales para el programa de privatización de las empresas estatales.
Las reformas económicas lanzadas en Costa de Marfil en 1990 dieron nueva vida a la BVA, que había sido fundada en 1976 durante un período de auge económico, pero pronto había decaído a causa de la recesión subsiguiente.
La capitalización de la BVA creció violentamente entre 1990 (295 millones de dólares) y fines de marzo pasado, cuando llegó a 1.000 millones de dólares.
El índice general de la BVA (128,95 en enero de 1995) se elevó hasta el nivel de 304,30 en marzo de este año, con más de 30 compañías cotizadas en el mercado.
Según Naka, el índice de las 12 empresas líderes del mercado – que no superaba el nivel de 88,02 a principios de 1995- se colocó en 209,51 a fines de marzo pasado.
La BVA movilizó un total de 24 millones de dólares para inversión en el programa de privatizaciones y reformas económicas de Costa de Marfil, entre 1992 y 1995. (FIN/IPS/tra-en/md/jm/arl/if/96)
