Representantes de 24 partidos políticos de América Latina y el Caribe rechazaron la política de Estados Unidos hacia Cuba, la situación neocolonial de Puerto Rico y la presunta intromision de Washington en los asuntos de Colombia.
La Conferencia Permanente de Partidos Políticos de América Latina y el Caribe (Copppal) resolvió el domingo en Panamá al culminar su XIX reunión plenaria que la ley Helms-Burton que endurece las sanciones estadounidenses contra Cuba es "anticuada e ineficaz" y tiene "pretensiones intervencionistas".
Además, la ley, promulgada la semana pasada por el presidente Bill Clinton, "es ajena no sólo al derecho internacional y al comercio mundial sino a la más elemental lógica de las relaciones entre naciones soberanas", precisó la Copppal.
La organización, integrada mayoritariamente por partidos de tendencia socialdemócrata, incorporó recientemente al Partido Comunísta de Cuba como miembro pleno.
"Es absurdo que el gobierno de Estados Unidos pretenda arrogarse la autoridad de imponer una ley sobre normas jurídicas y los derechos de los demás países del planeta", puntualizó.
El delegado del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) de El Salvador, Schafik Handal, dijo al respecto que el endurecimiento del bloqueo contra Cuba "es primero contra el mundo para imponerle una política y (que) por eso no es casual el rechazo de la Unión Europea, Canadá, México o Panamá".
"Esto va contra el derecho internacional (y) si se acepta el precedente, entonces la fuente del derecho mundial tendrá que ser el Congreso de Estados Unidos y eso no puede ser", destacó el ex comandante guerrillero.
"Cada país tiene su soberanía, su parlamento, las relaciones internacionales son con la participación de todos", puntualizó Handal al referirse al endurecimiento de las sanciones contra Cuba luego que ese país derribó dos avionetas tripuladas por opositores al presidente Fidel Castro.
Además de las duras críticas contra la ley Helms-Burton, la XIX reunión plenaria de Copppal señaló su preocupación por la situación que vive Colombia luego de las denuncias contra el presidente Ernesto Samper por el presunto uso de dinero del narcotráfico en la campaña electoral de 1994.
Copppal no emitió juicio sobre el asunto, pero advirtió que Colombia "es víctima de la intromisión externa, particularmente en la certificación (de Estados Unidos) del narcotráfico, un fenomeno que requiere, ante todo, de soluciones de carácter político y social".
Clinton "descertificó" recientemente a Colombia por su presunta poca cooperación en la lucha internacional contra el tráfico de drogas.
Ello inhabilita a Bogotá a recibir ayuda federal estadounidense y apoyo de Washington para conseguir créditos en los organismos financieros internacionales.
El presidente de Copppal, el mexicano Santiago Oñates, demandó "un mayor compromiso de los países condumidores de drogas para combatir el flagelo, ya que de lo contrario la misma lógica del mercado que tanto ponderan hará imposible terminar con el narcotráfico", subrayó.
En cuanto a Puerto Rico, la organización política regional reclamó "el derecho inalienable a su independencia" y expresó satisfacción de que Estados Unidos "haya reconocido la relación de carácter colonial" que mantiene con esa isla caribeña.
La Coppal también se pronunció por el cumplimiento de los tratados del canal de Panamá, que debe retornar a jurisdicción de este país en diciembre de 1999, y reconoció como "positiva" la reanudación de las negociaciones de paz entre la guerrilla y el gobierno de Guatemala. (FIN/IPS/sh/dg/ip/96)