En vísperas de una nueva ronda de conversaciones y en una virtual carrera contra el tiempo, Chile y el Mercado Comun del Sur (Mercosur) analizan diversas fórmulas para alcanzar el hasta ahora esquivo acuerdo de libre comercio.
Los negociadores de ambas partes se reunirán otra vez el as martes y miércoles de la semana próxima en Buenos Aires, presionados por la fecha del día 31, que marca, hasta ahora, el plazo final para llegar a un entendimiento.
La adopción de un régimen "superlento" de desgravámenes arancelarios y el establecimiento de cupos especiales de importación en el intercambio comercial son mencionados en Santiago como fórmulas para superar los desacuerdos.
Chile y el bloque subregional que integran Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay comenzaron a negociar en septiembre de 1994 un tratado "cuatro más uno" de asociación económica y libre comercio.
Carlos Mladinic, jefe del equipo negociador chileno, manifestó su esperanza en que la próxima reunión permitirá zanjar los temas más complejos para el intercambio comercial, quedando pendiente sólo la solución de "problemas menores".
Mladinic se está reuniendo con altos funcionarios gubernamentales para evaluar los resultados de la última reunión con el Mercosur, realizada el díaa 1 en la capital argentina, y fijar pautas hacia el nuevo encuentro.
En las sesiones de trabajo participan los ministros de Economía y Relaciones Exteriores, Alvaro García y José Miguel Insulza, y Augusto Bermúdez, embajador de Chile en Uruguay y representante ante la Asociacion Latinoamericana de Integración (Aladi).
La presencia de Bermúdez avala las versiones de que ambas partes estarían dispuestas a una prórroga adicional de los acuerdos bilaterales de preferencias arancelarias en el seno de Aladi, que vencen el día 31.
Las preferencias, ya prorrogadas anteriormente, debían expirar el último día de 1995, pero ambas partes convinieron en una extensión adicional tras fracasar en sus empeños de suscribir el acuerdo el 7 de diciembre.
Una fuente de la Dirección Económica de la cancillería chilena dijo esta semana al diario Estrategia que existe "95 por ciento de posibilidades" de que los cinco países resuelvan una nueva ampliación de las actuales facilidades arancelarias.
Las decisiones al respecto dependerán de los resultados de la reunión del martes y miércoles, donde se aclararía si el Mercosur y Chile son capaces de superar sus diferencias pendientes antes de que finalice este mes.
Mladinic señaló este miércoles que su delegación insistirá en la desgravación "superlenta" para los productos agrícolas más sensibles, en que los productores chilenos temen una "invasión" desde sus vecinos del Mercosur.
Chile está dispuesto a que se reduzcan los plazos de liberación arancelaria para lo que considera productos agrícolas "menos sensibles", según especificó el jefe del equipo negociador.
El ministro de Agricultura, Emiliano Ortega, refutó a su vez que su sector esté "entrabando" las negociaciones con el Mercosur y llamó a "poner las cosas en sus justos términos", por sobre visiones "reduccionistas".
En medios empresariales se señaló que la fórmula de cupos especiales de importación contribuiría a superar diferencias sobre productos llamados sensibles que hasta la fecha aparecen excluidos de las listas de intercambio.
Tal fórmula se aplicaría a exportaciones chilenas hacia el Mercosur, como los vinos finos, la pulpa de tomate y las conservas de durazno, asi como a las carnes y arroz que Chile importa desde el bloque.
El acuerdo Chile-Mercosur permitiría liberar de aranceles a 60 por ciento del actual intercambio comercial entre los cinco países, en fases progresivas con un plazo máximo de 15 años.
El constante crecimiento del comercio entre los cinco países es el mayor incentivo para que ambas partes busquen la superación de sus últimas diferencias y avancen hacia un acuerdo final, según el diario Estrategia.
El rotativo, especializado en temas económicos, resaltó que en 1995 el comercio de Chile con el bloque en el marco de los acuerdos Aladi llegó a casi 4,5 mil millones de dólares, en tanto el intercambio intraMercosur fue de 15 mil millones. (FIN/IPS/ggr/dg/if/96)