El presidente de Colombia, Ernesto Samper, negó de plano hoy que uno de sus objetivos en la cumbre del Grupo Andino fuera la búsqueda de apoyo del bloque ante la delicada crisis que vive su gobierno. Pero pocos minutos después, en rueda de prensa, confirmó indirectamente esa intención.
"No he venido a buscar apoyo. El problema de la acusación fiscal contra mi gobierno se está resolviendo dentro de la juridicidad y Constitución de mi país y estoy seguro que la verdad brillará y me exonerará", dijo un sonriente Samper mientras se abría paso hacia la sala de conferencias.
Poco después, en la rueda de prensa, fue inevitable que se le repitiera la pregunta y Samper repitió la respuesta.
No obstante, posteriormente se refirió al proyecto para la "Declaración de Trujillo" presentado por Colombia, que damanda la coordinación internacional y el tratamiento multilateral en la lucha contra el narcotráfico.
"En todas las reuniones anteriores del Grupo Andino se ha planteado la cooperación internacional como una herramienta necesaria contra un enemigo muy poderoso financieramente, que trata de infiltrarse no sólo en nuestros gobiernos, sino en todas nuestras instituciones, expresó el mandatario colombiano.
Samper se negó a confirmar si se considera víctima de una maniobra montada por Estados Unidos, en el caso de la reciente descertificación de Colombia por parte de Washington debido a su insuficiente cooperación en la lucha contra el narcotráfico.
"Me gustaría saberlo si así fuera, pero no tengo elementos para considerar algo de esa naturaleza", afirmó.
No obstantes, condenó la forma unilateral como operó el gobierno estadounidense en el tema de la descertificación de Colombia y aseguró que no se tomó en cuenta "la cruenta y esforzada" lucha de su país en esta materia.
"Los países productores de drogas no podemos ser los únicos responsables de resolverles el problema a los consumidores", añadió.
Respecto de los incidentes fronterizos entre Colombia y Venezuela, Samper lamentó que las relaciones parecieran a veces limitarse a ese tipo de conflictos y recordó que el país vecino es su principal socio comercial.
"Los gobiernos de ambos países hemos tomado la decisión de resolver esos pequeños problemas sin enturbiar el horizonte de nuestras relaciones, que son fructíferas y amistosas", aseveró.
En cuanto a la importancia concedida por Colombia al Grupo Andino, teniendo en cuenta que ha suscrito un pacto trilateral con México y Venezuela, el mandatario aseguró que la participación en los distintos bloques de integración no es excluyente.
"Por el contrario, si consideramos que existen numerosos bloques y acuerdos bilaterales que engloban a todos los países de la región, podemos considerar que la Zona Americana de Libre Comercio no es un objetivo lejano, sino que se acerca también por la integración de los bloques subregionales", dijo Samper.
El mandatario colombiano indicó que el Grupo Andino debe convertirse en un bloque abierto y estar en condiciones de negociar con otros espacios regionales, ya que "la globalización mundial no significa que los países deben integrarse aisladamente, sino dentro de una dinámica de bloques".
"Por eso estamos todos de acuerdo en que el Grupo Andino, el proceso de integración más antiguo de la región, que ha cumplido y seguirá cumpliendo un rol fundamental, después de haber creado dinámicamente un espacio comercial interior, debe encaminarse ahora hacia el exterior", afirmó.
"Y para ello adoptaremos las medidas y reformas necesarias", añadió.
Samper fue el único de los presidentes presentes en la cumbre andina que aceptó dar una conferencia de prensa antes de que concluyan las discusiones sobre la "Declaración de Trujillo". (FIN/IPS/al/ag/ip-if/96)
