Por primera vez organizaciones no gubernamentales de Costa Rica ejecutarán proyectos financiados por el Fondo de Población de Naciones Unidas (FNUAP).
Cuatro organizaciones civiles comenzaron a efectuar conjuntamente un plan para brindar capacitación a grupos de mujeres marginadas.
Así, más de 5.000 mujeres de zonas rurales, algunas de ellas indígenas, y de barrios pobres de las ciudades, recibirán información sobre salud reproductiva y género.
Para ello, recibieron el visto bueno del FNUAP, con lo cual se podrán asegurar parte de la ayuda que en materia de población dará Naciones Unidas a Costa Rica en 1996.
La iniciativa fue bien vista por la oficina local del Fondo de Población.
Las organizaciones que por un año ejecutarán este programa son la Asociación Demográfica Costarricense, la Alianza de Mujeres Costarricenses, el Centro Nacional de Educación Cooperativa y el Consejo Nacional de Mujeres Indígenas.
Ana Hernández, de la Alianza de Mujeres Costarricenses, destacó que las primeras mil beneficiarias recibirán la enseñanza directamente mediante charlas, seminarios, conferencias y actividades similares. Estas mismas mujeres transmitirán luego los conocimientos adquiridos a otras.
"Hay tal grado de ignorancia y discriminación que algunas mujeres desconocen cómo funcionan sus cuerpos", expresó Hernández.
La tasa de fecundidad, que es en promedio de tres hijos por mujer, se eleva a entre cinco y seis hijos en los grupos de población marginada, indicó la experta.
En su labor, las organizaciones civiles no estarán solas, ya que contarán con el conocimiento que del desarrollo del proyecto tienen las instituciones gubernamentales rectoras de las políticas de población.
"Las organizaciones no gubernamentales vamos a fortalecer a las instituciones del Estado que brindan servicios en salud", afirmó Hernández.
Las mujeres asistidas recibirán información acerca de sus derechos a ser atendidas en las clínicas de salud e incluso a vencer el temor de enfrentar a los médicos, "que a veces desdeñan un examen a profundidad de los problemas femeninos", indicó Hernández.
"Tenemos como objetivo propiciar la incorporación de la mujer al desarrollo económico, político y social, pero que lo haga consciente de su género", expresó Flor Moya, del grupo de cooperativas.
"Para los cooperativistas esto es algo nuevo, pero el movimiento cooperativo tiene como objeto elevar la calidad de vida de las personas y consideramos que una forma de hacerlo es brindando conocimientos sobre la salud reproductiva", señaló.
Para el proyecto se escogieron integrantes de cooperativas productoras de plátanos de un área bastante alejada del Valle Central, centro del país que concentra los servicios de salud.
En el área se asientan descendientes de tribus aborígenes, con escaso acceso a los servicios públicos, y mucho menos a los de salud, indicó Ester Kamac, del Consejo de Mujeres Indígenas.
Allí se impartirán conocimientos sobre paternidad y maternidad responsables, salud reproductiva, violencia intrafamiliar, entre otros.
En estos proyectos se invertirán más de 60.000 dólares. Además, el Fondo de Población invertirá este año algo más de medio millón de dólares en programas de población que incolucran a varias instituciones gubernamentales de Costa Rica.
David Smith, representante del FNUAP en este país, anunció que está en ejecución la fase final del fortalecimiento de la instituciones gubernamentales encargadas de las políticas de población, destinados esencialmente a los sectores más pobres. (FIN/IPS/jlf/dg/pr/96)