El presidente de la Corte Suprema de Justicia de Chile, Servando Jordán, negó hoy que hayan existido presiones para cerrar la investigación del asesinato del dirigente sindical Tucapel Jiménez.
Jiménez, presidente de la Asociación Nacional de Empleados fiscales (ANEF), fue asesinado en 1982 por agentes de seguridad de la dictadura del general Augusto Pinochet (1973-90).
Jordán informó que solicitó al magistrado Sergio Valenzuela, responsable del caso, que agilice el proceso, algo en lo que han insistido tanto el gobierno del presidente Eduardo Frei como dirigentes sindicales y políticos.
En tanto, el abogado de la familia de Jiménez, Jorge Saavedra, apeló el sábado ante Valenzuela para incluir dentro de la investigación varias diligencias cruciales para el futuro del proceso.
Según Saavedra, esto determinaría la participación de otras personas en el asesinato, además del ex agente de la Central Nacional de Informaciones (CNI), Carlos Herrera, único procesado por el delito.
Al momento de su asesinato Jiménez era, además de dirigente de la ANEF el principal impulsor de la unidad de los trabajadores en contra la dictadura militar.
El 26 de febrero de 1982, un día después de ser secuestrado por agentes de seguridad, su cadáver fue hallado dentro de un taxi de su propiedad en Lampa, un suburbio en el norte de Santiago. (FIN/IPS/mjc-agr/ag/hd/96)