Unos 1.500 empresarios americanos demandaron hoy medidas de mayor apertura y menos proteccionismo en el proceso de negociación del Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA).
Los empresarios pidieron desde mantener las grandes líneas de reforma económica en América Latina hasta implantar el Sistema Métrico Decimal en Estados Unidos, pasando por la supresión de la ley Helms-Burton, que acentúa sanciones económicas contra Cuba.
Ministros de Comercio Exterior de 34 países del hemisferio recibieron de los empresarios, en esta ciudad del Caribe colombiano, recomendaciones generales sobre integración económica y comercial, y propuestas para eliminar obstáculos a ese proceso en cinco áreas específicas.
Los gobiernos de esos 34 países establecieron en 1994 que para el año 2005 tendrían en marcha el ALCA y para diseñar la negociación reunieron a sus ministros de Comercio el año pasado en Denver, Estados Unidos, y este jueves en Cartagena.
El comienzo de la cita ministerial engarzó con el fin del foro de los empresarios, que constituyó a un tiempo excelente vitrina comercial para Colombia y respaldo del sector privado al proceso de integración americana.
La primera recomendación de los empresarios es mantener el ritmo de reformas en la región y asegurar que las economías de los países socios "funcionen con estabilidad".
Los países americanos deben "evitar los desequilibrios en sus economías y retomar el crecimiento: avanzar en esa dirección para aprovechar los beneficios del ALCA", señala el documento entregado a los ministros.
Esos requisitos "son esenciales para que los agentes económicos puedan participar y aprovechar oportunidades de comercio e inversión", dijo el venezolano Miguel Rodríguez, asesor comercial de la Organización de Estados Americanos y relator del comité que estudió obstáculos para el ALCA.
En segundo término, se subrayó "la necesidad de que el Estado funcione efectiva y eficientemente", habiéndose sugerido en los debates la adopción de alguna metodología para medir la eficiencia de los despachos oficiales.
Luego se plantea "evitar que consideraciones políticas y estratégicas, como la estadounidense ley Helms-Burton pudieran dejar sin efecto acuerdos de libre comercio y la expansión de su liberalización".
Este punto se adoptó luego que el empresario canadiense James Kelly presentó la Ley Helms-Burton como un obstáculo para la integración interamericana.
Con esa ley, puede negarse visa en Estados Unidos a empresarios de terceros países que negocien con Cuba y ciudadanos estadounidenses pueden demandar a empresas extranjeras que negocien con bienes producto de propiedades cubanas expropiadas a antiguos dueños.
"No consideramos el problema de Cuba sino el precedente que se crea para la integración comercial, porque Estados Unidos pretende someter a ciudadanos no-estadounidenses a la jurisdicción de sus leyes y tribunales", dijo a IPS Kelly.
Los empresarios pidieron mayor participación en el proceso de negociaciones de ALCA, luego que en otro de sus talleres produjeron una crítica a la ausencia de mecanismos en ese sentido.
Se plantea constituir una red de información y seguimiento del proceso negociador "y de su instrumentación, porque los empresarios son los que en definitiva pueden darle un sustento adecuado" a la estructura del ALCA.
Las recomendaciones para materias específicas se dirigieron a procedimientos aduaneros y normas de origen, normas técnicas, propiedad intelectual, problemas sanitarios y fitosanitarios, y comercio de servicios.
Se pide avanzar rápidamente en la eliminación de obstáculos derivados de normas aduaneras, evitando el embargo caprichoso de buques, creando bases de datos sobre aduanas de público acceso, y promover la aceptación de documentos que puedan transmitirse por vía electrónica.
Para las normas de origen que se imponen a los productos exportables, los empresarios pidieron no esperar al 2005 "y definir cuanto antes el sistema de normas de origen que se aplicará".
Sobre normas técnicas, se pide avanzar sobre temas específicos, como el etiquetado, las normas ecológicas y la armonización de los distintos sistemas normativos, "que pueden ser instrumento de liberación o de freno" para el libre comercio.
Capítulo aparte mereció el llamado para que en el proceso del ALCA se insista sobre Estados Unidos para que cambie su sistema de medidas anglosajón, de base duodecimal, y adopte definitivamente el sistema métrico decimal.
Se acepta "la necesidad de contar con sistemas de propiedad intelectual modernos, que garanticen efectiva transparencia en la transferencia de tecnología y adecuada protección de los consumidores".
Acerca de los problemas sanitarios y fitosanitarios, se subrayó la conveniencia de evitar que esas normas constituyan freno al comercio de productos agrícolas. También se pidió avanzar hacia un comercio agrícola sin subsidios.
Sobre el comercio de servicios, se propuso "su acelerada liberalización, dado el papel que juega como dinamizador de la integración por ejemplo el comercio de servicios profesionales".
Finalmente, los empresarios insistieron en la necesidad de formar recursos humanos para el proceso integrador, con la educación de negociadores, técnicos aduaneros y expertos en el manejo de los sistemas de normas que rigen el comercio internacional.
Los ministros, que este jueves sumarán la propuesta de los empresarios a sus propios borradores, prevén crear cuatro nuevos grupos de estudio, sobre propiedad intelectual, compás gubernamentales, servicios y políticas de competencia.
Desde Denver funcionan grupos sobre acceso a mercados, procedimientos aduaneros y normas de origen, inversiones, normas y barreras técnicas al comercio, medidas sanitarias y fitosanitarias, subsidios y antidumping, y economías más pequeñas. (FIN/IPS/hm/ag/if/96)