/AMBIENTE/: Rusia recibiría desechos nucleares de Taiwán

Una empresa nuclear estatal de Taiwán proyectaría embarcar 5.000 litros de residuos nucleares para su reprocesamiento en una planta cercana a Moscú, en contra de las leyes ambientales de Rusia y su supuesta política de importación de desechos.

Taiwan Power Company (Taipower) afirmó que aún no se ha adoptado una decisión final sobre el asunto, pero funcionarios del puerto de Murmansk, en la península de Kola, sostuvieron que el embarque llegará en abril, según se les informó.

De acuerdo con el plan, inicialmente 33 contenedores de desechos serían enviados a la planta de Moscú para su reprocesamiento.

Greenpeace Russia, entre otros movimientos ambientalistas, afirman que tal embarque constituiría una grave violación a la Ley de Protección Ambiental, pero reconocen que los desesperantes problemas financieros de la industria rusa la hacen desafiar la ley ante la posibilidad de buenos contratos extranjeros.

Legalmente, Rusia puede recibir únicamente desperdicios de plantas nucleares de naciones de la ex Unión Soviética.

Georgi Kaurov, jefe del Departamento de Información del Ministerio de Energía Atómica, aseguró que no existen planes de aceptar desechos nucleares de procedencia extranjera para su procesamiento o almacenamiento.

"Rusia nunca ha aceptado desperdicios nucleares extranjeros en el pasado, no lo hace actualmente y no lo hará en el futuro", insistió Kaurov.

Sin embargo, funcionarios de Taipower sostienen que, aunque aún no se ha tomado una decisión sobre el embarque de desechos a Rusia, prosiguen las negociaciones, en marcha desde hace varios meses.

Las instalaciones para almacenamiento de desperdicios de Taiwán están colmadas, y el gobierno procura soluciones alternativas. Taipower también mantuvo conversaciones con el Instituto Kurchatov de Moscú y la asociación Radon, responsable por la eliminación de desechos nucleares industriales en Rusia.

Ciertas negociaciones con Radon trataron sobre la posible importación de 33 contenedores de desechos nucleares de bajo nivel por parte de una compañía de Moscú, Sinter Limited, para su procesamiento y almacenamiento en las instalaciones de Radon, en Zagorsk. Unos 3.000 contenedores habrían sido importados.

La contradicción entre estos acuerdos y la ley no disuade a ninguna de las partes. Las negociaciones continúan aun cuando el acuerdo Sinter-Radon fue bloqueado por el Comité Estatal para la Seguridad Nuclear (GAN), que amenazó con retirar la licencia de Sinter para trabajar con materiales radiactivos.

GAN pretende que países como Taiwán se encarguen de sus propios desechos y está dispuesto a venderles la tecnología necesaria para hacerlo, pero cree que Rusia no debe convertirse en un vertedero de los desperdicios nucleares del mundo, señaló Yuri Vishnevsky, presidente del comité.

Mientras, Andrei Gagarinsky, portavoz del Instituto Kurchatov, niega que las conversaciones con Taipower se relacionen con contratos de embarque. Aunque admitió que el instituto tiene un acuerdo de cooperación con la compañía taiwanesa, afirmó que "sólo se trata de una investigación científica".

Taipower, por otra parte, insiste en que un memorando de entendimiento suscripto con Kurchatov el pasado mayo fue el precursor de un contrato de importación, y que el puerto de Murmansk está a la espera del cargamento.

El motivo de tales acuerdos es puramente económico para ambas partes. Mientras los costos de la disposición de residuos aumentan en Occidente, Rusia necesita divisas y puede ofrecer el mismo servicio por la mitad de precio.

No obstante, Rusia tiene sus propios problemas de desechos radiactivos y necesita urgentemente nuevas instalaciones en el Artico y el extremo oriental del país, donde los residuos se acumulan en vertederos sin protección.

Este año el gobierno asignó casi 18 millones de dólares al programa federal para el procesamiento de desperdicios nucleares, aunque se necesitarían unos 100 millones, según Nikolai Yegorov, viceministro de Energía Atómica.

Varios países occidentales emprendieron proyectos conjuntos con Rusia debido a la incapacidad de este país para financiar por sí solo estos importantes programas.

Así, Estados Unidos y Noruega ayudan a Rusia a perfeccionar su instalación para el tratamiento de desechos radiactivos de bajo nivel en Murmansk. (FIN/IPS/tra-en/jmp/rj/ml/en/96)

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe