/AMBIENTE/: Los pesticidas, "asesinos ocultos"

Los pesticidas dañan el sistema inmunológico de humanos y animales, aseguró una institución investigadora y política de Estados Unidos, en un duro golpe a una industria que produce anualmente 30.000 millones de dólares en todo el mundo.

Este riesgo es particularmente grave en naciones en desarrollo y de la ex Unión Soviética, concluyó el Instituto de Recursos Mundiales (IRM) de Washington tras revisar cientos de estudios de diversos países, y destacó que los niños son especialmente susceptibles.

La salud de cientos de millones de consumidores, así como de trabajadores y habitantes rurales, podría estar en peligro, de acuerdo con "Los pesticidas y el sistema inmunológico", el nuevo informe del IRM, publicado este viernes en Washington.

"Este asunto es demasiado importante como para ser ignorado. Un sistema inmunológico en buen funcionamiento es imprescindible para la vida", destacó Robert Repetto, coautor del reporte de 103 páginas.

Particularmente alarmante es el hecho de que nunca se realizaron estudios sobre los efectos en el sistema inmunológico de la mayoría de los pesticidas presentes en el mercado, tanto para uso comercial como de jardinería.

La principal conclusión del informe es que los pesticidas podrían constituir lo que Repetto denomina "asesinos ocultos", dado que la causa inmediata de la muerte de sus víctimas es normalmente una enfermedad infecciosa común, pero la mediata podría ser el daño causado por los pesticidas al sistema inmunológico.

"Exhortamos a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a emprender un programa de investigación de gran escala sobre la vinculación entre los pesticidas y el daño al sistema inmunológico", dice el informe.

El IRM también instó a las grandes compañías de pesticidas, a las instituciones financieras multilaterales y a los estados miembros de la OMS a financiar "esta importante campaña por la salud pública".

Los estudios revisados por los investigadores del IRM y una junta asesora de destacados toxicólogos estadounidenses fueron de tres tipos: pruebas de laboratorio con animales, investigaciones sobre la fauna y sobre epidemiología humana.

Aunque ningún estudio prueba en forma concluyente la vinculación entre los pesticidas y el daño al sistema inmunológico, "en su conjunto plantean varios datos preocupantes", señaló Repetto.

Cientos de experimentos de laboratorio demostraron que muchos pesticidas vuelven a los animales más susceptibles a las enfermedades al reducir el número de glóbulos blancos y linfocitos – que destruyen las bacterias y los virus- y alterar el desarrollo del timo y el bazo, importantes órganos del sistema inmunológico.

Entre los pesticidas que producen este efecto se encuentran los organocloros, como el DDT, los organofosfatos y los carbamatos.

Respecto a su efecto sobre los seres humanos, estudios epidemiológicos de Canadá y la ex Union Soviética demuestran que los niños y adultos expuestos a pesticidas sufren alteraciones inmunológicas similares a las de los animales, así como altas tasas de enfermedades infecciosas, según el informe.

En Moldova central, donde se han utilizado pesticidas en forma extensiva, los investigadores descubrieron que 80 por ciento de los niños de zonas rurales tenían un sistema inmunológico anormal y una probabilidad al menos dos veces mayor que el resto de la población de contraer enfermedades digestivas y respiratorias contagiosas.

En las comunidades inuit de Canadá, que consumen principalmente pescado y otros animales marinos altamente contaminados con pesticidas, los niños y lactantes presentan claras deficiencias inmunológicas.

Los casos de meningitis y de infecciones del oído interno en los niños de estas comunidades son, en proporción, 30 veces más frecuentes que entre los niños de Estados Unidos, de acuerdo con el estudio.

La exposición a pesticidas también podría ser la responsable de recientes muertes de focas en Europa, delfines en el Mediterráneo, el mar del Norte y el Atlántico norte, así como de ballenas beluga en la vía marítima de San Lorenzo, Canadá, afirmó el reporte.

Aunque tales estudios tienen importantes implicaciones para Estados Unidos, Europa occidental y Japón, que juntos representaron 62 por ciento del mercado mundial de pesticidas el pasado año, las consecuencias para los países en desarrollo serían más graves.

Los mercados de más rápido crecimiento para los pesticidas se encuentran en América Latina y Asia, y el aumento de las exportaciones agrícolas en el mundo en desarrollo prácticamente asegura un incremento de la demanda de estos compuestos químicos.

Además, la mayoría de los países pobres no cuentan con una estricta regulación del uso de pesticidas como en las naciones industrializadas.

Estos factores, junto con una incidencia mucho mayor de la desnutrición, una población más joven y más rural e inadecuados programas de salud pública, hacen que el Tercer Mundo sea más vulnerable a la amenaza inmunológica que representan los pesticidas, destaca el estudio.

Para combatir esta amenaza, el IRM demanda un control gubernamental mucho más estricto sobre el empleo de pesticidas, especialmente en países en desarrollo, y la exigencia de pruebas sobre la inmunotoxicidad de los productos antes de ser lanzados al mercado.

Así mismo, instituciones como el Banco Mundial deberían ofrecer más apoyo a sistemas integrados de tratamiento de pestes, lo cual reduciría la necesidad de pesticidas, y aumentar los créditos para sistemas de saneamiento, suministro de agua y atención de la salud en naciones pobres. (FIN/IPS/tra-en/jl/yjc/ml/en/96)

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe