Varias especies de aves que habitan bosques sudamericanos sobre el océano Atlántico se extinguirán a menos que se tomen medidas urgentes contra la deforestación, advierte un artículo publicado hoy en la revista científica británica Nature.
Los autores del artículo son Andrew Balmford, del Departamento de Ciencias Animales y Vegetales de la Universidad de Sheffield, Gran Bretaña, y Thomas Brooks, del Departamento de Ecología y Biología Evolutiva de la Universidad de Tennessee, Estados Unidos.
Hasta el momento no ha desaparecido ninguna especie de ave aunque 90 por ciento de los bosques de la región fueron talados, y en base a ello recientes teorías intentaron desvincular el ritmo de deforestación del ritmo de extinción de especies.
No obstante, Balmford y Brooks sostienen que su teoría no deja de ser válida, dado que existe un desfasaje entre la deforestación y la extinción.
Los investigadores estudiaron las predicciones de extinción de pájaros en los bosques de la costa atlántica de Brasil y las compararon con los números actuales de aves utilizando datos de BirdLife International, una federación de organizaciones no gubernamentales dedicada a la protección de las aves.
La correlación entre las especies amenazadas y las predicciones teóricas fue casi perfecta. Con este enfoque, los científicos predijeron la extinción de 88 de las 214 especies endémicas, con 60 especies amenazadas.
"Sin una inmediata acción de conservación, las numerosas especies actualmente amenazadas de los bosques del Atlántico se extinguirán", advirtieron.
El hecho de que hasta el momento no se produjeran extinciones en los bosques del Atlántico pese a la extensiva deforestación del área ha sido utilizado por escépticos para cuestionar la validez de teorías convencionales sobre el equilibrio ecológico, que relacionan el número de especies con su habitat.
Estas teorías, según las cuales la pérdida de 90 por ciento del territorio produce la extinción de la mitad de las especies locales, son ahora atacadas.
La crítica más enérgica fue la del libro "Nature's Keepers" (Conservadores de la Naturaleza), de Stephen Budiansky, quien afirmó que las predicciones basadas en la relación entre las especies y su área son "un absurdo biológico".
Sin embargo, Balmford previno que sus predicciones no se cumplirán instantáneamente. "No predecimos una extinción de la noche a la mañana, sino gradual", explicó.
Agregó que, utilizando el mismo método, la teoría puede ser aplicada también a los bosques de Filipinas, Indonesia, otras regiones del Lejano Oriente y el norte de Estados Unidos.
La tasa de deforestación está en aumento, "pero lo peor es que las regiones que más bosques pierden son las que poseen el mayor número de especies endémicas", observó el científico.
La zona tropical sudamericana es una de las regiones más diversas del mundo en términos de especies de aves. Con sólo 16 por ciento del área terrestre mundial, esta región posee 3.800, o 39 por ciento, de las 9.700 especies de aves de todo el mundo.
En este contexto, Balmford resalta la importancia de la validación de la teoría que relaciona las especies con su área. "En general la voluntad política para la conservación de la naturaleza surge a partir de cifras que preocupan a la opinión pública. Es esencial que esas cifras sean correctas", destacó. (FIN/IPS/tra-en/jmp/rj/ml/en/96)