El fin de las pruebas nucleares en el Pacifico Sur hizo reaparecer las llagas coloniales y revivio las demandas por urgentes cambios politicos, economicos y sociales en las posesiones francesas de Polinesia.
"Ahora que las pruebas han cesado, la prioridad es encontrar alternativas para la Polinesia francesa", dijo Gabriel Tertiarahi, titular de la ONG local Hiti Tau y de la regional de organizaciones no gubernamentales Alianza Internacional del Pacifico.
Despues de la sexta y ultima prueba subterranea del 27 de enero en el atolon de Fangataufa, el presidente Jacques Chirac puso punto final a las explosiones atomicas francesas en el Pacifico y aseguro que el pais poseia ahora un moderno y confiable sistema de defensa.
Chirac tambien concluyo con 36 anos de experimentos franceses, incluidas 17 explosiones en la parte argelina del desierto de Sahara desde 1966 a 1969, y otras 193 en los atolones de Mururoa y Fangataufa durante las ultimas tres decadas.
"Los planes sobre el futuro de Polinesia deberan incluir la rehabilitacion de los dos poligonos de pruebas. Es dudoso que puedan ser explotados como lugares turisticos y, por el contrario, deberan ser monitoreados por la acumulacion de materiales radiactivos a que fueron sometidos", apunto Bruno Barrillot, del Centro de Estudios y Documentacion sobre Paz y Conflictos.
Los expertos sobre Polinesia afirmaron que cualquier plan de desarrollo para las islas no puede estar limitado a medidas economicas. Mas de 30 anos de pruebas nucleares y la dependencia financiera de la region causada por los militares dejaron problemas de dificil solucion.
"Creo que despues de las pruebas las cosas quedaran como eran durante los experimentos. En vez de creditos militares, otros prestamos de Francia seguiran manteniendo la region en las mismas condiciones de dependencia", opino Barrillot.
El economista Pierre Blanchet, analizando el plan de conversion o el llamado Pacto de Progreso elaborado entre Paris y las autoridades polinesias despues de la moratoria de las pruebas en 1992, apunto que no proponia nada que pudiera cambiar el actual estado de la situacion.
Anadio que desde 1983 el 75 por ciento de la poblacion y el 75 de la mano de obra se habia concentrado en Tahiti y Moorea. Ambas islas cuentan con la mayor presencia de hombres de negocios y pequenas comunidades de campesinos y pescadores.
En el libro "Tahiti despues de la bomba: cual futuro para Polinesia", que escribio con otros observadores de la region, Blanchet apunto que las disparidades geograficas se vieron acompanadas por amplias grietas socioeconomicas.
Hay dos veces mas desempleados entre nativos polinesios que entre europeos y chinos. Mientras la mitad de los europeos y chinos tienen educacion secundaria solo un quinto de los polinesios asistio al liceo.
"La desestabilizacion de la gente coincidio con la marginalizacion de los jovenes. Incapaces de construirse un futuro, buscaron refugio en los milagros artificiales como la droga, el alcohol y la delincuencia menor", escribio Blanchet.
Con el fin de los experimentos, algunos observadores han sugerido que las mejores perspectivas para reconvertir la Polinesia francesa radican en el turismo, el cultivo de perlas y la pesca.
"Las propuestas para reducir la dependencia economica de Polinesia de la metropoli francesa estan basadas sobre todo en la perspectiva de obtener consistentes ingresos del turismo", senalo Barrillot.
"Sin embargo, hay que aclarar que los ingresos por el turismo han venido declinando rapidamente en los ultimos anos. Ademas, una fuerte competencia por el mercado de perlas negras se ha registrado en otras fuentes, como Filipinas. En pesca, los derechos solo fueron vendidos a industrias foraneas", acoto.
"El sector que hay que desarrollar ahora no es el turismo porque la mayor parte de los beneficios que produce, en lugar de mejorar la situacion de Polinesia y su gente, va a parar a los bolsillos de transnacionales o las arcas de Paris", dijo Tertiarahi.
Su ONG, Hiti Tau, ha venido desarrollando modestos proyectos de sustento como el cultivo de la vainilla, para crear trabajo y reintegrar a los marginados. "El principal objetivo no es el lucro sino que la gente le tome el gusto al trabajo", dijo Barrillot.
El experto insistio que el punto debil del Pacto de Progreso es su falta de alternativas politicas. "No contempla la posibilidad de redistribuir el poder local y no brinda ninguna agenda para cambiar el estatuto de Polinesia mas alla de sus 10 anos de vigencia", dijo.
"Tampoco preve un referendum y, sin esa alternativa, el pacto propone nada menos que la continuacion de la misma politica de dependencia economica respecto a Francia continental", lamento.
Agrego que el pacto no demanda esfuerzo competitivo alguno de las autoridades locales. "En efecto, la autonomia otorgada a Polinesia desde 1977 ha permitido a la elite local de administrar practicamente sin ningun control todos los creditos dados a las islas en compensacion de las pruebas".
"De ese modo, ha generado una clase politica crecientemente corrupta y embrollada en casos legales. Por lo tanto, es dificil imaginar de que modo esa misma gente, que se beneficio durante 30 anos con el sistema, podra hacer otra cosa", dijo.
"En el analisis final, la cuestion reside en el papel que juega Francia en el Pacifico Sur. Podra conservar su condicion de potencia de segunda clase, que es a lo que aspira, si pierde peso en una region que practicamente ya habla solo ingles?", inquirio. FIN/IPS/tra-en/ao/rj/ego/ip).
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