Una posible solucion a la crisis de gobierno en Italia parece abrirse ahora, pero aun no se ha vencido la oposicion a un acuerdo em sendos sectores de las dos grandes coaliciones, la de centroderecha y la de centroizquierda.
A un mes y un dia de iniciada la crisis con la dimision del primer ministro Lamberto Dini, se intensifican las reuniones, secretas o publicas, llamadas telefonicos e incluso dialogos epistolares.
Silvio Berlusconi, lider de la coalicion de centroderecha, y Massimo D'Alema, secretario de la principal fuerza de la de centroizquierda, el Partido Democratico de Izquierda (PDS), mantuvieron abierto el dialogo a traves de cartas.
Los dirigentes emplean todos los medios, los modernos y los menos modernos, para auscultar la posibilidad de que el primer ministro designado, Antonio Maccanico, de vida a un gobierno que tendria como tarea fundamental reformar la Constitucion de Italia, aprobada en el lejano 1948.
Ya existe un acuerdo en cuanto al establecimiento de un sistema "semipresidencial", como el que existe en Francia, en lugar del actual parlamentario al que se atribuye la inestabilidad politica pues los gobiernos se mantienen, en promedio, menos de un ano en el poder.
El sistema frances dispone la eleccion directa del Presidente de la Republica, figura que cumple funciones politicas.
Sin embargo, aun no surgio con claridad la mayoria que podria apoyar el nuevo gobierno, pues dentro de las dos coaliciones existen fuerzas que se oponen a las enmiendas.
Dentro de la alianza de centroizquierda, el Partido Popular (PPI), uno de los tres grupos que se formaron a raiz de la desaparicion en 1992 de la otrora poderosa Democracia Cristiana italiana, no se aviene al acuerdo.
El PPI es una fuerza minoritaria dentro de la coalicion, pero la derrota o la victoria en las proximas elecciones parlamentarias se decidiran por un punado de votos, segun pronostican las encuestas.
En el Polo de la Libertad (liga de centroderecha), el sector hasta ahora contrario al acuerdo es la derechista Alianza Nacional, cuyo lider, Gianfranco Fini, reclama para el Presidente de la Republica mayores atribuciones que las que esta dispuesta a conceder la coalicion de centroizquierda.
Fini postula que el Primer Ministro sea nombrado por el Presidente de la Republica, sin necesidad del voto de confianza del parlamento que plantean los centroizquierdistas.
Segun distintos estudios de opinion publica, si se convocara a elecciones, Alianza Nacional se transformaria en la primera fuerza del pais, con alrededor de 22 por ciento de los votos, por encima del PDS y de su propia aliada en la coalicion de centroderecha, Forza Italia, liderada por Berlusconi.
La alianza de centroizquierda acusa a Fini de impedir un acuerdo para provocar el adelanto de los comicios con el objetivo de aprovechar este momento de popularidad.
Destacados juristas italianos defienden las bondades del sistema semipresidencial frances, que nacio, dijeron, de la fragmentacion de las fuerzas politicas de la IV Republica, que provocaba inestabilidad en los gobiernos.
Esa situacion es muy parecida a la de Italia hoy, pues existen mas de 30 partidos.
La Constitucion de Francia, subrayan los tecnicos, permite la alternancia entre las fuerzas politicas, tanto en las mayorias parlamentarias como en la Presidencia de la Republica.
La posibilidad de constituir el nuevo gobierno en Italia se deberia resolver dentro de poco tiempo, posiblemente este miercoles, afirmo el subsecretario del gobierno, Guglielmo Negri. En caso contrario, Maccanico deberia renunciar.
El Presidente de la Republica, Oscar Luigi Scalfaro, podria entonces disolver la Camara de Diputados y el Senado y adelantar la convocatoria a elecciones parlamentarias para abril o junio. (FIN/IPS/jp/mj/eu ip/96)
