El presidente de Colombia, Ernesto Samper, envió al gobierno de Estados Unidos un detallado informe sobre la lucha contra el narcotráfico, a cuatro días que el Congreso decida si le concede la certificación, lo que le permitiría continuar contando con la cooperación norteamericana.
En un mensaje dirigido al presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, en el que no hace referencia explícita al proceso de certificación, Samper afirma que para Colombia es fundamental continuar trabajando con su gobierno para derrotar de una vez por todas "el flagelo del narcotráfico".
El año pasado la erradicación de cultivos ilícitos superó ampliamente las metas previstas y a los esfuerzos en esta materia se sumaron los de la fuerza pública y la justicia, que incautaron gran cantidad de drogas y detuvieron a sus responsables.
El informe del mandatario colombiano señala que en 1995 se erradicaron 25.402 hectáreas de coca, frente a 4.090 el año anterior, y destaca el avance en el control del lavado de dinero procedente del narcotráfico.
"Todos estos resultados han sido posibles gracias a la cooperación de la comunidad internacional", dijo Samper.
Este viernes, el Congreso estadounidense evaluará el desempeño de Colombia en su lucha contra el narcotráfico en 1995 y tendría en cuenta la crisis que afronta el gobierno de Samper, señalaron expertos.
Este factor político hace pensar que en el mejor de los casos Colombia sería certificada por razones de "seguridad nacional" de Estados Unidos, según el investigador Juan Tokatlián, quien no descartó la posibilidad de descertificación.
En caso de descertificación, Colombia perdería la asistencia oficial de Estados Unidos y las preferencias comerciales para 6.000 productos, además de recibir el veto de los representantes de ese país ante los organísmos multilaterales de crédito. (FIN/IPS/yf/ag/ip/96)