El gobierno de Peru debera ocuparse de las injusticias estructurales existentes en las areas rurales antes de que pueda asegurar que el proceso de pacificacion en el pais es irreversible, sostuvo un informe de derechos humanos de las Naciones Unidas.
Mientras no se eliminen las causas profundas de la violencia, se hace dificil afirmar que el pais recuperara una autentica estabilidad, dijo el documento.
La investigacion, realizada por el experto sudanes Francis M. Deng, representante del Secretario General de la ONU, se centro en los problemas que sufren alrededor de un millon de desplazados internos como consecuencia del conflicto librado durante 15 anos entre grupos armados de oposicion y el gobierno.
El informe de Deng, que sera debatido durante la sesion de la Comision de Derechos Humanos de la ONU que comenzara el 18 de marzo, afirmo que Peru retorno a una situacion de relativa normalidad respecto del umbral de ingobernabilidad de hace pocos anos.
La presentacion del representante de Boutros Boutros-Ghali afirmo que la violencia hoy ha decrecido en Peru.
Sin embargo, dijo que vastas areas del pais aun se encuentran relativamente aisladas y que persisten divisiones economicas y sociales entre diferentes grupos etnicos.
Deng estimo importante recordar que la oposicion armada se fortalecio en los departamentos mas aislados del pais, que eran precisamente los de mayor pobreza.
Aunque la ideologia politica elitista de la principal fuerza guerrillera, Sendero Luminoso, y la naturaleza terrorista de muchas de sus operaciones le privaron del apoyo popular, llevara tiempo cerrar las heridas abiertas, sostuvo el documento.
El gobierno de Peru ha adoptado una posicion rigida al proclamar que una vez derrotado el terrorismo ya puede iniciarse el desarrollo y los desplazados por el enfrentamiento pueden regresar a sus hogares, agrego.
Pero los desplazados estiman que sus penurias no se originaron solo por la accion de los disidentes armados pues influyeron todos los agentes de la violencia, en especial las causas subyacentes del conflicto, senalo Deng.
El informe de la ONU considero necesario un dialogo entre el gobierno de Peru y las personas desplazadas. Tambien auspicia la participacion de organizaciones no gubernamentales para ampliar la asistencia a los desplazados en las zonas mas remotas.
Deng expreso que, si bien las violaciones a los derechos humanos han disminuido, en las zonas de emergencia existe la sensacion "de que puede ocurrir cualquier cosa, en especial a la luz de la casi total impunidad de los militares".
Algunos altos funcionarios del gobierno admitieron que ese clima persiste porque "parece que las partes en conflicto mantendran la mentalidad de violencia durante los anos venideros", indico.
En Peru se observa "una desconfianza de las autoridades en el imperio de la ley y de la justicia, con el consiguiente mal funcionamiento de los poderes legislativo y judicial", aseverO la investigacion.
El representante del Secretario General de la ONU reclamo la condena de las violaciones de los derechos humanos y la revision de las leyes que violan los patrones internacionales, como las denominadas de amnistia, sancionadas a mediados de 1995 para favorecer a militares acusados de delitos de represion.
Tambien sostuvo que mantienen validez las recomendaciones sobre ejecuciones extrajudiciales sumarias y arbitrarias efectuadas por el Relator Especial de Derechos Humanos que visito Peru.
El informe pidio la solucion de los casos de "desaparecidos" aun pendientes y el establecimiento de un mecanismo de compensacion para las victimas de abusos.
La gran mayoria de los desplazados por el conflicto en Peru pertenecen a comunidades indigenas y nativas. La violencia y el desplazamiento alteraron sus formas de vida, afirmo Deng.
Psicologos y sociolgos que trabajan con los desplazados afirmaron que esas comunidades sufren el desarraigo mas que ninguna otra poblacion de la region de los Andes, pues pierdeN los vinculos con sus tierras y con sus tradiciones.
Las mujeres han resultado afectadas en forma desproporcionada por la violencia y el desplazamiento, explico el informe.
Ellas pertenecen a comunidades marginadas, sus familias sufrieron la violencia, su situacion domestica de subordinacion las somete a la agresion, su participacion en organizaciones desata la persecucion, y corren los riesgos de violencia ejercida en base al genero, afirmo.
Aunque en algunos casos el desplazamiento ha dado a las mujeres nuevos papeles y oportunidades de organizacion, para la mayoria ha significado un empeoramiento de las estructuras de subordinacion.
Las mujeres que deben proveer el sustento a sus familias desempenan a menudo trabajos excesivos y afrontan grandes riesgos de sufrir explotacion y abusos.
En la busqueda de empleo, las mujeres sufren mas marginacion y discriminacion, principalmente debido a que carecen de educacion y no hablan el idioma castellano.
Un estudio realizado en un asentamiento precario cercano a Lima demostro que 89 por ciento de los desplazados totalmente analfabetos eran mujeres.
La mayoria de las mujeres permanecen aisladas en las barriadas pobres donde se refugian los desplazados, ubicadas en zonas urbanas y en regiones selvaticas.
Las organizaciones no gubernamentales que prestan asistencia a los desplazados observaron que las barreras culturales con las mujeres desplazadas son dificiles de derribar y dificultan las tareas de apoyo psicologico.
El informe destaco que los ninos desplazados tambien soportan problemas graves.
La investigacion menciono la falta de oportunidades para la educacion, los problemas de salud, el insuficiente apoyo familiar y las dificultades de integracion en la sociedad urbana. (FIN/IPS/pc/la hd pr/96)