Una banda militar interpreto "Cumpleanos Feliz" cuando el presidente de Venezuela, Rafael Caldera, ingreso hoy a su oficina, mientras a 200 metros millares de empleados publicos manifestaban ruidosamente por mejores salarios y cese de despidos.
El mandatario pidio como regalo por sus 80 anos y ser, con el dominicano Joaquin Balaguer, uno de los dos gobernantes octogenarios de America Latina, "paz, comprension, apoyo, estimulo y fe en Venezuela", mientras recibia congratulaciones de sus colaboradores y amigos.
Asi continuo Caldera, un socialcristiano, su propuesta de claves para superar la crisis economica: voluntad, dialogo constructivo, consenso, mayores cargas sobre quienes mejor puedan soportarlas y unidad nacional.
En la acera de enfrente, opositores politicos, economistas independientes, organizaciones empresariales y sindicales, y expertos del Fondo Monetario Internacional (FMI) reclaman racionalidad en las cuentas publicas y coherencia de las politicas economicas.
Ambos enfoques se han confrontado desde que Caldera asumio su segunda presidencia, en febrero de 1994, y a juzgar por el clima en que arriba a sus 80 anos, se mantendra como rasgo distintivo de Venezuela en el futuro cercano.
En esa guerra de palabras contra numeros tercia el descontento social, evidenciado con los bajos indices de respaldo a Caldera en las encuestas de opinion, y subrayado esta semana con manifestaciones de protesta de estudiantes y trabajadores.
Esta semana, al menos siete ciudades vivieron demostraciones estudiantiles, con amagos de desordenes y saqueos, y en Caracas hubo ademas protestas de trabajadores por anunciados cambios en leyes sociales.
Este miercoles continuaron las protestas de estudiantes contra previsibles alzas en el transporte publico y varios miles de empleados publicos exigieron discutir una nueva convencion colectiva, bajo amenaza de ir a la huelga la proxima semana.
Economistas y sindicalistas advierten que este puede ser un "ano caliente" de protestas laborales y sociales, en tanto el sesgo politico fue mostrado el martes por el ex militar golpista Hugo Chavez, al encabezar una de las marchas de trabajadores.
Esa agitacion, para analistas "punta del iceberg" del descontento y sobre todo del desencanto, llega hasta Caldera como indeseado presente cuando persiste en defender "lo social" frente a la insensibilidad de "lo economico".
"Yo conozco a mi pais mucho mejor que el senor (Michel) Camdessus", director gerente del FMI, dijo el mandatario al explicar sus criticas a la "falta de sensibilidad de algunos tecnicos" del organismo multilateral, con el que Venezuela discute las condiciones de un prestamo.
Venezuela pidio al FMI 3.000 millones de dolares para apuntalar sus reservas, que sufrieron fuertes caidas pese al control de cambios que implanto el gobierno, y aval para que otros organismos multilaterales aporten recursos adicionales.
Los tecnicos del FMI examinaron las propuestas venezolanas y senalaron que, pese a su discurso, el gobierno de Caldera gastaba menos de un punto del producto interno bruto en programas sociales compensatorios y pidieron que se triplique esa cifra.
El FMI tambien objeto los esquemas tributarios del gobierno de Caldera y sugirio el aumento del precio de la gasolina, de sus actuales tres centavos de dolar por litro hasta un valor igual a los precios de exportacion.
La medida es rehuida por el presidente, pues desde su exitosa campana electoral de 1993 ofrecio aumentar el precio de la gasolina solo "cuando el pueblo pueda pagarlo" y alrededor de esa consigna giran otras decisiones economicas.
Economistas independientes y directivos del grupo estatal Petroleos de Venezuela no han logrado convencer al mandatario de que el subsidio a la gasolina beneficia mas a los ricos que a los pobres, mientras sus criticos abiertos lo acusan acremente de que "estudio economia por el Viejo Testamento".
Esa tozudez seria expresion en lo economico de la proverbial tenacidad del mandatario, pero tambien de la intuicion con la que acompano su formacion humanista y sus luchas politicas, y que le advertirian del caracter explosivo del alza de la gasolina.
El historiador Manuel Caballero advirtio, por otra parte, que la tenacidad es el complemento de la soberbia que los enemigos enrostran a Caldera, al explicar las claves de su exito como lider historico en Venezuela, al margen de la evaluacion que se haga de sus gobiernos.
Caldera ya fue presidente entre 1969 y 1974, cuando era maximo dirigente de Copei, el partido socialcristiano que fundo en 1946 y del cual se separo en 1993 para buscar una segunda presidencia como candidato suprapartidista.
Esto lo convirtio, con Jose Tadeo Monagas, un general de la guerra de Independencia que fue tres veces presidente en el siglo XIX, en uno de los dos gobernantes octogenarios en la historia de Venezuela, un pais donde hoy 70 por ciento de la poblacion tiene menos de 30 anos.
Nacido el 24 de enero de 1916 en la centrooccidental San Felipe, una pequena ciudad agricola, Caldera fue un brillante alumno de colegios jesuitas y companero del lider chileno Eduardo Frei en la reunion mundial de jovenes catolicos que, en 1934, los condujo a la lucha politica.
Abogado, experto en derecho laboral, casado y con seis hijos, varios de ellos colaboradores de su actual gobierno, el mandatario es percibido, junto al socialdemocrata Romulo Betancourt y el liberal Jovito Villalba como uno de los padres de la democracia en Venezuela.
Segun Caballero, el mayor merito de Caldera, como el de Frei, fue "aplicar la mas importante y fructifera leccion dada por el Papa Leon XIII a los catolicos franceses: reconocer la republica, que aborrecian por igualitaria y laica".
Caldera fue en Venezuela "el primero en crear un partido de masas a partir de un conservatismo arrinconado y endogamo" y, a diferencia de Betancourt, "el primer lider politico en acceder al poder por la via del voto popular directo, sin acortar caminos", resumio Caballero.
Betancourt, maximo dirigente del partido Accion Democratica hasta su muerte en 1981, llego al poder por primera vez al frente de un golpe civico-militar en 1945, antes de ser electo presidente por sufragio universal en 1958. (FIN/IPS/hm/ag/ip/96)
