Una campana de recoleccion de fondos para la reconstruccion del teatro lirico La Fenice de Venecia, uno de los mas hermosos del mundo, destruido la madrugada del martes, se lanzo en Italia y en todo el mundo.
La destruccion de uno de los templos mundiales de la lirica y simbolo de la cultura veneciana, por el cual han pasado los mayores artistas de la musica en sus mas de 200 anos de vida, provoco una verdadera conmocion internacional.
La Fenice era meta obligada de los amantes de la musica cuando visitaban Venecia, ciudad que junto a Florencia y Roma constituyen las mayores atracciones turisticas para los mas de 30 millones de personas que visitan Italia cada ano.
El alcalde de Venecia, Massimo Caciari, juro que la reconstruccion sera rapidisima. "Dentro de dos anos renacera de sus cenizas. La Fenice sera reconstruido donde estaba y como era", aseguro.
Una verdadera competencia de solidaridad se desato para reparar el teatro despues de que el mundo vio a traves de la television como habia quedado esa joya arquitectonica.
Un diluvio de ofrecimientos que seran coordinados por el alcalde de Venecia contribuiran en la reconstruccion, que tendra un costo estimado de 300 millones de dolares.
Aunque el nombre del celebre teatro alude al Ave Fenix, el pajaro mitologico que resucita de sus propias cenizas, volver de la muerte no es ciertamente una empresa facil.
Alcaldes e industriales de Italia se pusieron en campana, mientras el Fondo de las Naciones Unidas para la Cultura y la Educacion, que en estos momentos no cuenta con grandes recursos, se comprometio a buscar fondos para la reconstruccion.
La Union Europea anuncio que otorgara 150.000 dolares, mientras desde Estados Unidos el Museo Metropolitano, de Nueva York, informo sobre sus deseos de ayudar.
Los industriales de la region del Veneto solicitaron a las organizaciones empresariales europeas contribuciones para la reconstruccion, mientras el ministerio de Relaciones Exteriores de Italia pidio a todos sus institutos de cultura que promuevan colectas.
El cineasta y actor Woody Allen, quien debia actuar con su grupo de jazz en La Fenice el 1 de marzo, dio su propia interpretacion sobre el incendio.
"Como yo tenia que tocar alli mi clarinete, no tengo ninguna duda de que se trato de un atentado de algun verdadero amante de la musica", ironizo.
En declaraciones al diario La Repubblica desde Nueva York, poco antes de comenzar su gira musical europea, preciso, por temor a ser mal interpretado, que sus palabras respondian al deseo de "aliviar el dolor de todos, pues yo tambien tengo el corazon roto".
"Los venecianos pueden contar conmigo. Hare todo lo que me sea posible" en favor de la reconstruccion, agrego.
En Italia se plantean criticas e interrogantes sobre como pudo ocurrir el incendio y por que fue imposible extinguirlo antes de que las llamas destruyeran totalmente este teatro con capacidad para 1.500 personas, del cual solo quedo en pie su fachada.
El fuego comenzo a las 21.00 horas de Italia (20.00 GMT) del lunes pasado y fue extinguido recien a las cinco de la manana del martes, aunque pequenos focos continuaron ardiendo en las primeras horas de la tarde.
El fuego hizo lo que quiso en un teatro abandonado a si mismo, cerrado desde agosto pasado por reparaciones, con una vigilancia inexistente, sin sistema de alarma, con una antigua instalacion contra incendios desactivada y con una nueva aun sin funcionar.
"Existen ciertamente responsabilidades porque el fuego no se encendio solo. Pero no se que lo provoco, si fue producto de los trabajos de restauracion que se estaban realizando, de una gran negligencia u otra cosa", dijo el alcalde Caciari.
El Poder Judicial y el municipio de Venecia desarrollan investigaciones paralelas.
"Usaremos el maximo rigor en verificar las negligencias y las responsabilidades", dijo Cacciari, quien dijo no tener elementos para pronunciarse respecto de un posible sabotaje.
El ministro de Cultura de Italia, Antonio Paolucci, visito el miercoles el teatro y reitero que el gobierno otorgara de inmediato 12 millones de dolares para emprender lo mas urgente de la reconstruccion. (FIN/IPS/jp/mj/cr/96)